La mayoría de las veces, son las mujeres las que renuncian a su carrera cuando tienen hijos. Y cuando después de unos años quieren volver al ruedo, muchas se preguntan "¿qué es lo que aún sé hacer?".
A esto se suma que muchas veces el trabajo que solían hacer cambió mucho.
Si trabajaba, por ejemplo, en un banco, es probable que se haya ampliado la cartera de clientes que haya que atender. Esto lleva a que algunas mujeres se sientan amedrentadas.
Por eso, al regresar al mundo laboral, suelen elegir trabajos que están muy por debajo de su calificación.
Pero no tiene por qué ser así: los expertos recomiendan asesorarse con un coach laboral antes de dar el paso y elegir de acuerdo a la preparación que se tenga.
El principal error es creer que de esos trabajos más pequeños se podrá saltar a otros más grandes.
No es siempre así. Por eso, antes de volver a trabajar, es importante hablar bien con la familia para contar con su apoyo y con otras mujeres que hayan pasado por lo mismo.
Es preferible tomarse un poco más de tiempo de reflexión sobre qué queremos hacer y cómo a tomar cualquier oportunidad que surja en el momento
