El nuevo desafío ya está en marcha. El Tomba vuelve a empezar. Y Banfield estará enfrente en el Malvinas Argentinas.
Con otra cara. Diferente a la que mostró en el torneo anterior, en cuanto a técnico y jugadores.
Con la categoría asegurada y pensando en el torno de Transición, todos imaginaban un elenco consolidado sustentado en la columna vertebral que tan buenos resultados le dio a Jorge Almirón.
Pero nada de eso ocurrió, y hoy se vive un panorama totalmente diferente.
¿Qué pasó? Ya no está el Negro en el cargo y lo reemplazó rápidamente Carlos Mayor, quien hará su bautismo en Primera División con los colores tombinos.
No hay dudas que será una prueba exigente para el adiestrador, luego de su paso por la reserva de Argentinos Juniors y dos clubes del ascenso.
Lo más profundo se dio con los futbolistas, ya que el equipo sufrió una sangría importante. Partieron siete titulares inamovibles por diferentes motivos, algo que no estaba en los planes de nadie.
Ya metido en el día a día, el flamante técnico comenzó con la "reconstrucción" del conjunto para afrontar el certamen.
Arribaron muchos profesionales, aunque sin grandes apellidos y sólo sobresale el regreso de Rubén Ramírez.
Mayor tendrá la enorme responsabilidad de implementar su idea futbolística, después del buen estilo que dejó Almirón.
El entrenador apuesta firme por un elenco ofensivo que pregone el juego atildado, pero al mismo tiempo sabe que le llevará algunos encuentros poder ajustar los detalles.
Habrá que ver si puede convertir a este modelo en gran protagonista del fútbol argentino.
