Las rayas, tanto verticales como horizontales, casi siempre aportan color y adornan la pared sin necesidad de grandes cuadros, espejos, vinilos, etc. Antes de de empezar la decoración debés tener en cuenta algunas premisas, como el color predominante en el espacio, el ancho de las rayas o la cantidad que querés hacer de las mismas.
Otra de las ventajas, es que si te atrevés a hacerlo vos misma, resulta muy económico.
En primer lugar, necesitás varios tarros de pintura, cinta de enmascarar, un rodillo y un pincel fino para repasarlo todo. El método es muy sencillo, sólo tenés que poner la cinta en la pared, asegurándote formar líneas rectas y comenzar a pintar comprobando que la cinta no se despegue por ningún lado. Un buen truco es retirar la cinta cuando la pintura aún no está seca del todo.
VENTAJAS DE LAS RAYAS VERTICALES:
Las rayas verticales amplían la sensación de distancia entre en suelo y el techo y dan un carácter mucho más moderno. Las más cortas, aportan el efecto de enmarcar algunos sectores del espacio, A veces hasta simulan ser cuadros.
El color verde en estas líneas, aporta mucha luminosidad y energía, por lo que es perfecto para las zonas de paso como los pasillos o la entrada de casa. Si te decidís por este color podés usar dos tipos de verdes para hacer el dibujo y darle un aspecto más discreto, al reducirse la sensación de contraste.
VENTAJAS DE LAS RAYAS HORIZONTALES:
Cuando tenés un espacio no muy grande para decorar y querés agrandarlo la forma de conseguirlo es que pongas rayas horizontales en las paredes, ya que, en contra de las creencias populares, las rayas horizontales en los cuerpos y en los espacios los estilizan.
El psicólogo experto en percepción Peter Thomson, confirmó en 2008 que, a diferencia de lo que se cree, son las rayas horizontales, y no las verticales, las que estilizan. El estudio se basa en la teoría de la ilusión Helmholth, que nos demuestra que si incluís dentro de un cuadrado rayas horizontales del mismo grosor a la misma distancia éste parece visualmente más alto. Pero si hacés lo mismo con rayas verticales el cuadrado se ve más ancho. Si trasladamos esta teoría a la decoración conseguirás que tus paredes parezcan más altas, lo que hace que el espacio parezca mayor de lo que es en realidad.
Debés tener cuidado a la hora de elegir el grosor de las rayas, ya que si optás por unas líneas muy anchas causarás el efecto contrario y el espacio se reducirá. Del mismo modo que en una habitación pequeña se recomienda no utilizar muebles de gran formato, con los estampados (en este caso las rayas) ocurre lo mismo. Además, las rayas horizontales dirigen la vista dando así sensación de perspectiva.