"¿Quién quiere ser millonario?" es el nuevo éxito de Telefe. Su atractivo no es solamente por cuantiosos premios ni de la simpatía de Santiago del Moro. Hay historias de vida que suelen impactar a los televidentes y se convierten en objeto de debate en las redes sociales.
Mario Rodolfo "Fito" Frati es un hombre de 59 años que se llevó $ 500.000 en el programa de preguntas y respuestas. El participante contó una particular historia de vida: dijo que asistió a un colegio prestigioso, que tuvo un muy buen pasar económico, que vivió en Italia y que fue fotógrafo de Luis Alberto Spinetta y Mercedes Sosa. Pero sorprendió al asegurar que desde 2012 vive en la calle, a escasos pasos del shopping Unicenter.
"¿En qué momento te quedaste en la calle, o cómo fue la primera noche que dormiste en la calle mejor dicho?", le consultó el conductor, a lo que Fito contestó: "Yo tengo la experiencia del servicio militar, maniobras de supervivencia. Yo tuve una educación también muy estricta, en el buen sentido de la palabra, y eso me fortaleció".
"Pero no es la muerte de nadie, es la vida que te va conduciendo, te va llevando por situaciones disímiles. Confiaste en gente profesional de las leyes, y ellos tienen otra concepción de la vida y bueno, acá estamos, pero no estoy mal", reflexionó ante la ante mirada del público.
Pero en Twitter, como suele ocurrir, algunos usuarios se conmovían y otros desconfiaban. No faltaron los tuits que aseguraron que "Fito" estaba vinculado a la producción del programa y que "estaba todo arreglado".
En diálogo con Clarín, Fito brindó detalles de su historia de vida. "Fui al mejor colegio de la Argentina en los 70, el Ward de Ramos Mejía. Era pupilo allí. Fui parte de la Unión de Escuelas Secundarias y me salvé por cinco minutos de ser desaparecido en el 75 porque llegué unos minutos tarde a un encuentro en una Unidad Básica de Ramos, habían limpiado a todo el mundo", dijo.
"Mis padres tenían un muy buen pasar y yo tenía un muy buen pasar. Mi padre hacía muchos negocios. Yo tenía una muy buena vida bohemia. Fui fotógrafo, trabajé en Expreso Imaginario e hice imágenes para Spinetta, Seru Giran, Nito Mestre, León Gieco, Mercedes Sosa. Escribí mucho, pero para mí. No publiqué nada. Viví en Roma varios años, allí también trabajaba como fotógrafo", recordó.
Pero Fito rememoró que lo estafaron: "Cuando mis padres fallecieron fue el problema, durante la sucesión. Los abogados de toda la vida de él me hicieron firmar cosas que implicaban ceder todo lo que yo debía heredar como hijo único a su estudio profesional. Fue un fraude, una estafa. Durante un tiempo me sentí culpable, me pregunté por qué. Pero después ya no. Uno de ellos murió de cáncer de próstata y el otro fue revoleado por un auto y se murió también. Creo que todo vuelve".
En los últimos años, Fito afrontó varios problemas. "Quedé viudo. Recorrí el país en un Alfa Romeo, toda la ruta 40. Después perdí el auto. Tengo una hija pero ella decidió no reconocerme como padre, me niega. Tiene 28 años y vive en Europa, y no me elige, por eso dije que no tengo hijos", reveló.
"En 2012 volví a Buenos Aires. Y empecé a dormir en la calle. Cerca del shopping. Nunca tuve un episodio violento, pero dormir seis años en el piso no es gratis. El cuerpo todavía responde, pero a veces te despierta la lluvia o el frío. Trato de acostarme cansado porque si no la cabeza no para", sumó.
Sobre su rutina, Fito detalló: "Me levanto alrededor del mediodía, voy al shopping, leo los diarios, me compro un desayuno. También voy a la librería, leo bastante allí. La gente se me acerca, a veces me traen comida, a veces me preguntan si tengo plata para el día siguiente y me dejan algo de dinero. La gente es muy solidaria. Todo vuelve, porque yo era así cuando tenía".
El participante de "¿Quién quiere ser millonario?" recordó, además, que tuvo dengue. "Con 200 pesos suelo arreglarme. Vengo al shopping, en general me invitan el desayuno, y me paso acá el día. Antes de que cierren me voy, y camino para cansarme, para irme a dormir cansado y no pensar. Esos 200 pesos los consigo porque me dan plata o porque doy algunas clases particulares de inglés y de italiano a conocidos, circula boca a boca", relató.
¿Qué hará con los $ 500.000? "Es un milagro. Yo fui al cementerio adonde están mis viejos a pedirles que me tiraran una, y tres días después me llamaron para decirme que había quedado en el casting del programa. Volví al cementerio antes de participar y me fue bien. Esto es un milagro. Una nueva oportunidad. Pero hay que ser prudente porque debe ser la última. Así que ahora tal vez me vaya a Punta del Este un tiempo, unos amigos me avisaron que hicieron una colecta para que me quede allá un tiempito", anticipó Fito.