Una vez más, el Gobierno Nacional se olvidó de la vitivinicultura. El lunes pasado la presidente Cristina Fernández anunció un sistema de devolución de retenciones a la exportación, pero dejó de lado a la industria madre de Mendoza.
La noticia generó el enojo y la disconformidad del sector vitivinícola, que ha mantenido incontables reuniones con funcionarios locales y nacionales para pedir la eliminación total o parcial de los impuestos a la exportación en busca de mejoras de competitividad.
Cabe destacar que sólo fueron incluidos dentro del beneficio de devolución de retenciones los productores de hasta 700 toneladas de soja, maíz, trigo y girasol, quienes recibirán entre $ 45 y $ 450 anuales por tonelada producida.
La decepción vitivinícola
El atraso cambiario, la inflación y la fuerte presión tributaria comprometen día a día la competitividad de los vinos argentinos en el mundo, por lo que la devolución de retenciones se presenta como una oportunidad invaluable para recuperar participación en los mercados internacionales.
Sin embargo, la exclusión de la vitivinicultura en los anuncios del Gobierno nacional casi elimina cualquier esperanza de reducción o eliminación de retenciones durante el mandato oficialista.
Carlos Iannizzotto, Gerente de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas (Acovi), se mostró sorprendido por la indiferencia del Gobierno hacia los pedidos de la industria del vino. “Creíamos que iban a incluirnos, porque hemos solicitado la devolución de retenciones a todos los funcionarios, desde los ministros hasta a la Presidente”, comentó.
Para el dirigente “la Nación se olvidó de la vitivinicultura”, consideró que el anuncio “fue muy político” y “se implementó para resolver presiones”.
“Los más pequeños del país no fueron atendidos y sus necesidades fueron postergadas. Sólo se buscó premiar a una institución que salió de la Mesa de Enlace Agropecuaria (está compuesta por la Sociedad Rural Argentina, Federación Agraria Argentina, Confederaciones Rurales Argentinas y Coninagro) y no se priorizó conseguir beneficios para productores de las economías regionales”.
La interpretación de Iannizzotto no es infundada. Es que como sabemos, la contribución de la vitivinicultura al Producto Bruto Interno (PBI) nacional es mucho menor al del sector sojero, cuyo peso en la economía lo coloca en una posición mucho más firme a la hora de hacer reclamos al Gobierno. Mientras la participación de la vitivinicultura en el PBI está cerca del 1,36%, la soja alcanza el 5,5%.
También Mauro Sosa, gerente del Centro de Viñateros y Bodegueros del Este, reconoció que “históricamente el Gobierno nacional se ha concentrado en las necesidades de la Mesa de Enlace”, dejando de lado a las economías regionales.
Además, aseguró que si el Gobierno quitara las retenciones al sector vitivinícola, las bodegas compensarían la falta de competitividad producida por el atraso cambiario. "Aún no sería el mejor escenario, pero nos permitiría competir en el mundo", observó.
Juan Carlos Pina, gerente de Bodegas de Argentina, se sumó a los críticas hacia el Estado por la indiferencia hacia las economías regionales. "Parece mentira que en decisiones de este tipo no se tome en consideración el valor agregado que genera cada actividad", lamentó.
El dirigente remarcó que la vitivinicultura genera mucha más mano de obra que los sectores beneficiados con la devolución de retenciones.
“El 65% del costo de un kilo de uva es mano de obra. Por supuesto que ese valor agregado es positivo, pero a su vez la inflación nos afecta mucho más que a los sectores favorecidos”, señaló Pina.
Pedirán quita de retenciones
Hilda Wilhelm, presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), lamentó la exclusión de la vitivinicultura en el anuncio del Gobierno, pero aseguró que lo logrado por la Federaciuón Agraria es un antecedente positivo que dará pie al sector vitivinícola para endurecer su reclamo.
“Hoy más que nunca, estamos obligados a trabajar para lograr la devolución o quita de retenciones”, señaló.
Acovi, Bodegas de Argentina y el Centro de Viñateros y Bodegueros del Este también evalúan cómo avanzar en los reclamos.
El ruralismo, disconforme con los anuncios
El ruralismo objetó ayer la decisión del Gobierno de reintegrar un 5% de las retenciones granarias para pequeños productores que cosechen hasta 700 toneladas y reclamó la eliminación completa de los derechos de exportación.
Para el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Etchevehere, “es perverso poner al productor a seguir trámites engorrosos e incumplibles y subordinar la aplicación de la medida a la liquidación de divisas que hagan los exportadores”.
Cabe señalar que la medida fue acordada entre el Gobierno nacional y la Federación Agraria que conduce Omar Príncipe, pero no contó con la aprobación de las otras tres entidades rurales que conforman la Mesa de Enlace (Sociedad Rural Argentina, Confederaciones Rurales Argentinas y Confederación Intercooperativa Agropecuaria).
El trío ruralista aseguró que la “reducción de retenciones” propuesto por la Casa Rosada se suma a “otros que propuso el kirchnerismo, tales como el Trigo Plus y el Maíz Plus, que sólo quedaron en la promesa”.
Etchevehere reclamó la eliminación de los impuestos a las exportaciones y pidió a “los pre-candidatos del oficialismo” que expresen “qué planes tienen con las retenciones”, como ya lo hicieron los representantes de otros partidos políticos.
Frases destacadas
“Parece mentira que en decisiones de este tipo no se tome en cuenta el valor agregado que genera cada actividad” Juan Carlos Pina - Gerente de Bodegas de Argentina
“Creíamos que iban a incluirnos porque hemos solicitado la devolución de retenciones” Carlos Iannizzotto - Gerente de Acovi.
“Hoy más que nunca estamos obligados a trabajar para lograr la devolución o quita de retenciones” Hilda Wilhelm -titular de la Coviar.