La barrera química que produce el protector solar de factor elevado interfiere en la absorción de vitamina D que provee el sol y que es necesaria para la fijación del calcio en los huesos.
Sin embargo, el doctor Butterfield, sostiene que "con sólo 15 minutos que el sol dé en el antebrazo -con poca protección- se activa", con lo cual usar bronceadores no sería un problema en este sentido.
En tanto, Escobar destacó que si se tiene la precaución de no exponerse entre las 11 y las 16 "el sol es beneficioso para los huesos, en particular si se acompaña de actividad física. Entonces, en un buen horario una caminata es muy recomendable".