No tuvo una noche de luces ni tampoco la soltura de otras ocasiones, pero igual le alcanzó para ganar y retener el título a Betiana Viñas; la neuquina se impuso frente a la chubutense Soledad Matthysse por puntos en fallo dividido.
Victoria que le permite a Viñas continuar con el reinado pluma de plata del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), tras su segunda defensa, la cual tuvo lugar en el estadio La Colonia de Junín.
Los guarismos del jurado fueron los siguientes: Néstor Sabino vio ganar a Matthysse por 96 a 94. Arturo Villegas y Javier Geido le dieron sus tarjetas 96 a 64 en favor de Viñas. Para Más Deportes ganó Viñas 96 a 94.
Junín parece ser un lugar signado por los fallos polémicos, por lo cual en algún momento el intendente Mario Abed decidió no hacer más boxeo y el viernes volvió a poner su estadio.
La noche del viernes se repitió la historia, aunque para Más Deportes ganó sin dudas la púgil dirigida por Pablo Chacón.
Un combate desordenado y con mucha fricción, donde se repartieron las cargas en determinados pasajes, de los cuales Beti se llevó la mejor parte; más allá de la disconformidad del rincón chubutense en la decisión final.
Matthysse corajeaba a lo Matthysse y en aquello de ir a buscar el triunfo con un sólo golpe hizo que recibiera de contra.
Es verdad que no tuvieron profundidad los directos y llegadas de la campeona, pero sí fueron efectivos porque llegaron a destino y sumaron.
La “Itaka” como la llaman a la chubutense (muy lejos de serlo) con desorden y con la intensidad terminó algunos rounds mejor parada, pero antes de cada epílogo era la local la que conectaba con el jab y la volea de derecha.
Le faltó convicción a esta mendocina por adopción, lo que no significa que no ganara más rounds de los que perdió. En una pelea pareja y equilibrada, donde Matthysse tiró y erró con la misma fortuna que lo hizo la neuquina. Quizás sus golpes ampulosos hicieron parecer que lucía mejor parada. No fue así. Una revancha sería lo más adecuado para el pleito sureño.