Paraguay es el rival de Argentina en semifinales de la Copa América y no caben dudas de que será un rival durísimo para el equipo de Martino, no tanto por su poderío futbolístico, pero sí por el orden, el sacrificio y la entrega que demuestran en cada partido.
Al saberse inferiores en calidades individuales, el elenco de Ramón Díaz transformó en fortalezas esa conciencia de sus limitaciones y apela a un juego definido.
Intentando tocar el amor propio y el orgullo de sus dirigidos, el riojano soltó en el camarín antes de jugar contra Brasil: "Ya lo vieron, ya jugamos contra los mejores equipos. Hay que hacerse respetar ahí adentro. Volvieron a encontrar esa mística de siempre, volvimos a recuperarla. Ya vieron que nos daban por muertos. Depende de ustedes y de nadie más carajo..."
Más tarde llegó el turno del experimentado delantero Nelson Haedo Valdez, quien camino al terreno de juego, soltó una contundente frase de aliento en idioma guaraní.
Rebalsados de confianza, los jugadores de Paraguay eliminaron por penales a Brasil y ahora, quieren hacer lo mismo ante Argentina.
