Las imágenes de una brutal golpiza sufrida por un adulto mayor por parte de la policía chilena durante las protestas masivas realizadas por organizaciones feministas ayer y anteayer, que se viralizaron en las redes sociales, desataron hoy una nueva catarata de denuncias y reclamos contra los inéditos niveles de violencia de los Carabineros contra manifestantes.
El video, que tuvo decenas de miles de reproducciones en Twitter, Facebook e Instagram muestra cómo dos policías reducen a Patricio Bao, de 69 años, en las cercanías de la Plaza Italia (rebautizada Dignidad por los manifestantes) antes de propinarle una feroz golpiza pese a que el hombre no se resistía.
Un grupo de mujeres que intentaron defenderlo y gritaban a los policías "puede ser tu papá, puede ser tu abuelo", fueron violentamente empujadas por los miembros de las fuerzas antimotines con cascos y cachiporras, mientras uno de los policías reducía al anciano con un brazo sobre su cuello, hasta dejarlo luego ensangrentado en el suelo.
La brutalidad de las imágenes impactó incluso a Contraloría de Chile, una entidad fiscalizadora superior encargada de ejercer el control de legalidad de los actos de la Administración Pública chilena, que a través de su cuenta oficial de Twitter pidió más antecedentes para hacer la respectiva denuncia, informó el portal de noticias chileno El Desconcierto .
La Fiscalía Centro Norte, en tanto, abrió una investigación de oficio para indagar la agresión.
Anoche, y mientras el escándalo escalaba Carabineros se refirió a la denuncia a través del general Enrique Monras, jefe de Zona Metropolitana Oeste, quien indicó que "este es un hecho que ocurrió ayer, domingo, en el sector de Vicuña Mackenna con Carabineros de Chile en el contexto de ataques violentos a nuestro personal".
"Carabineros rechaza cualquier tipo de violencia y, en virtud de nuestro compromiso, transparencia y respeto a los derechos humanos, nos vemos en la obligación de aportar antecedentes adicionales a los que han sido difundidos, de manera que la ciudadanía conozca el origen y contexto de este caso", señaló Monras.
"La persona que protagoniza el video que se ha hecho viral fue detenida por desórdenes graves y atacó a los carabineros que se encontraban en clara desventaja numérica y procediendo en la detención de otros violentistas, quienes lanzaban objetos contundentes", agregó.
También, consignó que la detención del sujeto "fue declarada legal por el Juzgado de Garantía, e incluso se le decretaron medidas cautelares de firma mensual y prohibición de acercarse al lugar en un radio de 500 metros".
Más tarde, circuló un video grabado con una cámara policial en la que se ve al hombre mayor, antes de la golpiza, defendiendo a otro manifestante que era brutalmente reprimido en el piso por otro uniformado.
Quien también se refirió al hecho fue el director para las Américas de Human Rights Watch (HRW), José Luis Vivanco, quien a través de su cuenta de Twitter manifestó: "Espectáculo grotesco de brutalidad policial. Es imposible que Carabineros recupere la legitimidad ciudadana con conductas repugnantes como esta. Difícil que la institución eleve la moral de sus funcionarios si siguen cometiendo estos abusos".