Julio Roldán, "el doctor de las muñecas" - como se define él - contó cómo es el proceso de restauración, explicó cuándo y cómo se apasionó con este oficio y habló sobre sus trabajos más difíciles y de los más raros.
"Hace 50 años que restauro muñecas y recupero afectos", dijo el artesano.
Roldán tiene 67 años, su infancia la vivió en Córdoba, en una casa de bajos recursos. Con su padre hizo los primeros muñecos de barro y paja. Luego, en Buenos Aires, de la mano de un profesor aprendió el oficio del cual está "orgulloso".
"Me considero una persona feliz por la familia que formé y por el trabajo que elegí", dijo.