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hace 5 horas
Salió a luz el video que muestra cómo Cecilia Rivas (32), bailarina de pole dance, atropelló y mató a un delincuente tras perseguirlo con su auto luego de que, junto a un cómplice, le arrebatara su teléfono celular en el barrio porteño de Balvanera.
El hecho había ocurrido el 20 de mayo pasado, cuando dos "motochorros" interceptaron a la conductora de un Peugeot 207 que iba junto a otra mujer. En ese momento, uno de los delincuentes le quitó su teléfono celular y escapó rápidamente, pero Rivas comenzó a perseguirlo. Según fuentes policiales, la mujer embistió la moto y el que la conducía, Oscar Alejandro Orona (43), perdió el control, tras lo cual impactó contra un Renault Megane que estaba estacionado y perdió la vida.
Su cómplice, de nombre Julián Rodríguez Cardozo, es un joven de 21 años que tuvo que ser trasladado de urgencia al Ramos Mejía, donde quedó internado en terapia intensiva por “politraumatismos”.
Los hechos pueden apreciarse en detalle en un video publicado por el canal TN, que muestra el momento exacto del incidente. Las imágenes forman parte de la causa contra la bailarina, que fue procesada sin prisión preventiva por "homicidio con exceso en la legítima defensa" y embargada en un millón de pesos, informó Clarín.
Tanto en su indagatoria como en declaraciones a la prensa, la modelo y bailarina aseguró que los empezó a perseguir para poder filmarlos con la cámara del celular de su amiga y negó haber actuado con intención de causarles daño a los delincuentes.
La mujer dijo que los ladrones se cayeron de la moto porque ésta tambaleó y "resbaló" en la calzada, que luego "entró en shock" y no recordaba nada más de lo ocurrido y que los golpes en la parte frontal del Peugeot se debían a choques anteriores.
El juez Diego Slupski concluyó que Rivas actuó, al principio, amparada por el derecho de legítima defensa, ante una situación de peligro que generó un riesgo real con una agresión ilegítima que no estaba obligada a soportar.
Según el magistrado, la persecución para recuperar lo sustraído fue una conducta "racional", pero "la imputada excedió los límites de la legítima defensa", razón por la cual ordenó su procesamiento.
Para el juez, Rivas actuó de manera "voluntaria" y "dolosa", y con "pleno conocimiento e intención", decidió "avanzar hacia la motocicleta para embestirla", con lo que causó la muerte de Orona y las lesiones a Rodríguez Cardozo,
El homicidio con exceso en la legítima defensa está contemplado en el artículo 35 del Código Penal y se castiga con la pena del mismo delito pero culposo, es decir, en este caso, de 1 a 5 años de prisión.
