Victoria Vanucci y Matías Garfunkel pasean por Jerusalén en un viaje que mezcla lo laboral con lo religioso. En el medio hay un poco de erotismo. Al menos eso demuestra ella quien no duda en sacarse fotos muy pero muy provocativas.
La morocha es bella y lo sabe. Se cuida, se alimenta bien, hace gym y ostenta un lomazo. "Yo tengo el erotismo en las venas, es un fuego interno que nunca se apaga, no importa el momento que transite. Mi llama interior es el erotismo que me excita y me mantiene viva. Está presente en cada cosa que hago, ya sea en una mirada, mi vestuario o en la actitud", dijo ella tiempo atrás.
Esta enamorada pareja también celebra cinco años de amor en Tierra Santa. Él no duda en agradecerle este tiempo compartido. "Una mujer que hace feliz a su marido, logra tener una familia feliz. Eternamente agradecido. Te amo", publicó.