Por primera vez desde el inicio de la epidemia de coronavirus, China no registró ningún caso de contaminación local, una victoria simbólica que le permite lanzar una campaña de ayuda internacional.
Las autoridades temen ahora el aumento de los casos importados debido al avance incontenible de la pandemia de COVID-19 en Europa, su nuevo epicentro, particularmente en Italia, España y Francia.
Desde el miércoles, el número de personas muertas en el resto del mundo es superior a los decesos en China, donde surgió en diciembre, en la ciudad de Wuhan (centro), el temible virus.
Este jueves, el Ministerio Chino de Salud anunció cero contaminación de origen local, un logro que marca el inicio de una nueva etapa. Otro dato optimista, en las últimas 24 horas China registró solo ocho muertos, totalizando 3.245 desde el inicio de la epidemia.
En cambio, las autoridades anunciaron 34 personas contaminadas provenientes del extranjero, una cifra récord. Se trata en la mayoría de los casos de chinos que regresan de países duramente golpeados por el nuevo coronavirus. Los casos importados son en total 189.China, el país más afectado por la COVID-19, suma 80.928 contagiados, de los cuales 87% se curaron.
"No debemos permitir que se revierta la tendencia positiva obtenida mediante grandes esfuerzos", advirtió el miércoles el presidente chino Xi Jinping en una reunión del Partido Comunista de China (PCC).
Para evitar que los viajeros procedentes del extranjero reactiven una epidemia que parece controlada, el gobierno chino decidió imponer una cuarentena obligatoria a todas las personas que llegan al país.