Con el apoyo de la CGT y la sorpresiva abstención anunciada anoche, justo antes de la votación, de sus tradicionales aliados de la oposición, los espacios que lideran los exkirchneristas Sergio Massa y Diego Bossio, el Gobierno logró hoy su primera victoria parlamentaria de 2017: la Cámara de Diputados convirtió en ley la reforma del régimen de accidentes de trabajo.
La norma fue aprobada por 88 votos afirmativos, 22 en contra y las 44 abstenciones del massismo y el bloque Justicialista.
Graciela Camaño, por el massismo, y Bossio después anunciaron minutos antes del cierre de la sesión extraordinaria, convocada por el presidente Mauricio Macri con el único fin de tratar este proyecto, que le quitarían el apoyo al dictamen, que lleva las firmas de diputados de sendos espacios, como consecuencia del decreto dictado por el Poder Ejecutivo que modifica la fórmula de la ley de Movilidad Jubilatoria.
Los opositores consideraron que esto supone una rebaja de los haberes de los jubilados.
La noticia no sólo indignó a la oposición: la diputada Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica-ARI y fundadora de Cambiemos, afirmó que si lo que decían sus colegas del massismo y del bloque Justicialista era cierto, ella también planteaba una cuestión de privilegio contra el Poder Ejecutivo. "Nos comprometemos a que impere la ley vigente de actualización (de haber jubilatorios)", dijo Carrió, tajante.
El oficialismo había conseguido la semana pasada el apoyo del massismo y el Bloque Justicialista (BJ), cuyo referente es Bossio, luego de que la CGT diera luz verde para que la Cámara baja avalara el texto sancionado en diciembre en el Senado casi por unanimidad. Pero el decreto de modificación de la fórmula para actualizar los haberes jubilatorios produjo la ruptura del acuerdo.
Nueva ley
La clave de la reforma de la ley de ART es que declara de “carácter obligatorio y excluyente” la intervención en los accidentes de trabajo de las Comisiones Médicas Jurisdiccionales ya establecidas por ley. Hoy esa intervención es eludida y directamente se va a juicio con certificados médicos de cualquier profesional.
En Córdoba, la Justicia juzga miles de fraudes multimillonarios con certificados falsos. La resolución de la Comisión Médica “agotará la instancia administrativa”, dice el texto de la norma.
La Casa Rosada pidió la ley con el argumento de la necesidad de bajar la cantidad de juicios laborales. En efecto, en el primer día hábil tras la feria judicial, la Justicia Nacional del Trabajo recibió 800 demandas por presuntos accidentes laborales, más del doble del nivel habitual. En su mayoría, los planteos invocaron fallos previos de la Corte Suprema que declararon inconstitucional la intervención de las comisiones médicas.
Las comisiones son un paso obligado para el trabajador accidentado antes de acceder a la Justicia. Recién después, si no está conforme, el damnificado puede acudir a los tribunales.
"Este es un paso directo a la flexibilización laboral", dijo el diputado kirchnerista Áxel Kicillof, uno de los más críticos de la iniciativa. "Es mentira que esto va contra los empresarios. Solo el 5% de los juicios son contra los empresarios. El resto es contra las aseguradoras, que se están llenando de plata", dijo el exministro de Economía de la presidencia de Cristina Kirchner.
Señaló que "bajar los costos a las pymes sería que las ART cobren menos" y que el Gobierno a esto "ya lo puede hacer". "Regúlenles que cobren menos. Regulen eso. No le pongan trabas al trabajador", dijo Kicillof.
Por el oficialismo, el macrista Daniel Lipovetzky sostuvo que con la ley se está "protegiendo al trabajador" porque "si no está de acuerdo con lo que dice la comisión médica, puede presentar un recurso o accionar directamente ante la Justicia".
"Por primera vez estamos incorporando la posibilidad de actualizar las indemnizaciones por la tasa activa", destacó el diputado por la ciudad de Buenos Aires. Para el Gobierno, los trabajadores hoy tardan casi tres años en restituir sus derechos a partir de los juicios y hay casi 90 días de demora para que les otorguen un turno en las audiencias de las comisiones médicas.
La ley fue aprobada por Cambiemos y parte de los diputados del massismo y del BJ; y fue rechazada, entre otros bloques, por el Frente para la Victoria-PJ, el Movimiento Evita, el trotskismo, el socialismo y el GEN, que lidera Margarita Stolbizer, quien señaló que el Gobierno "se espanta por la cantidad de juicios laborales que hay en tribunales pero no por las causas por las cuales un trabajador va a juicio".
"Las causas se multiplican porque los trabajadores no gozan de buenas condiciones de trabajo y porque funciona un listado cerrado de enfermedades, y esta norma lo cierra aún más, contra el listado ampliado de la Organización Internacional del Trabajo (OIT)", dijo Stolbizer.
Daer: "No es un proyecto de la CGT"
El diputado massista e integrante del triunvirato de la CGT, Héctor Daer, defendió la reforma del régimen de ART. "Este es un proyecto del Ejecutivo, no es un proyecto de la CGT. Hubiésemos querido que este proyecto incluyera el tema de la prevención (de accidentes de trabajo)", afirmó el dirigente sindical, promediando las 9 de la noche, antes de que la iniciativa se sometiera a votación.
Daer pidió "no mezclar esto con la flexibilización laboral" y definió como "un logro" que en el texto de la norma se incluyera el tope de 60 días para que las comisiones médicas deban expedirse sobre un caso de enfermedad profesional.
