El perverso y aterrador Caso Próvolo sigue dando que hablar a nivel mundial. Las históricas condenas a los dos curas (Horacio Corbacho y Nicola Corradi) a 45 y 42 años de prisión, y al ex jardinero Armando Gómez (deberá pasar 18 años tras las rejas) tras ser encontrados autores de abusos sexuales y episodios de corrupción contra chicos sordos repercutieron en el mundo entero; mientras que en los Tribunales provinciales ya están en marchas las audiencias preliminares que anteceden al segundo juicio contra 9 mujeres (entre ellas, 2 monjas).
Tres sobrevivientes de los abusos en las sedes argentinas del instituto religioso -dos sufrieron los calvarios en Mendoza y uno de ellos fue víctima en La Plata- viajarán hoy por la siesta a Ginebra (Suiza). Convocados y con la asistencia de las ONG Xumek -a la que pertenecen algunos de los abogados querellantes-, Bishop Accountability -una organización que se encarga de contabilizar y llevar un registro de casos y obispos que han cometido abusos sexuales en el mundo- y ECA -sigla en ingles para Ponerle fin a Abusos Eclesiásticos-; los jóvenes y sus abogados van a presentar el Caso Próvolo y sus detalles y repercusiones a la Organización de las Naciones Unidas.
Por un lado, harán la exposición en el Comité de los Derechos del Niño (los y las sobrevivientes fueron atacadas cuando eran menores de edad). Y en la misma sintonía, expondrán en el Comité contra la Tortura de la entidad internacional.
El viaje se extenderá desde hoy y hasta el 24 de febrero, y no descartan una audiencia pública con el Papa.
Denuncia a la Iglesia
"La presentación tiene que ver con que en 2014, ambos comités de la ONU solicitaron a la Santa Sede que abandonara las prácticas encubridoras, ayudaran a las víctimas y colaboraran con información en los casos de abuso eclesiástico. Fue una solicitud que se hizo en general. Y no sólo que no acataron estos pedidos, sino que a fines del 2016 salió a la luz el Caso Próvolo, y se siguen observando estas prácticas", resumió el abogado Sergio Salinas, integrante de Xumek y quien viajará con los sobrevivientes junto al presidente de la ONG, Lucas Lecour. También participará de la misión la hermana de una de las víctima, y quien se comprometió en la causa y militó por el esclarecimiento y el fin del encubrimiento eclesiástico.
Dentro de la causa mendocina -y que tuvo su primera condena en noviembre del año pasado-, las víctimas también denunciaron por falta de colaboración al vicario judicial del Vaticano, Dante Simón, y al obispo de La Plata e interventor del Próvolo designado por el Papa, Alberto Bochatey. Incluso el fiscal de la causa, Gustavo Stroppiana, había ordenado a los religiosos que remitieran la información que la Iglesia tuviese disponible del caso -dentro de la investigación canónica-, algo que los sacerdotes no hicieron y por lo que fueron imputados.
Posible audiencia con el Papa
La segunda parte del viaje se centrará en Roma. Allí los sobrevivientes locales participarán de un encuentro con víctimas y sobrevivientes de abusos eclesiásticos de todo el mundo.
Hace ya tiempo, los damnificados en el Próvolo mendocino enviaron una carta al Papa Francisco solicitándole una audiencia para exponer la falta de colaboración de sus emisarios en el caso mendocino y para solicitarle que pida disculpas públicamente por el accionar del vicario judicial y del interventor designados por el mismo.
Aunque no existe ninguna confirmación, los jóvenes y sus abogados no pierden la esperanza de que Bergoglio los reciba en una audiencia pública para contestar a su requisitoria.