Fue una madrugada trágica donde mucho tuvo que ver la imprudencia humana y que terminó con una nueva víctima fatal y otra persona totalmente ajena al incidente como consecuencia de un accidente de tránsito.
Ocurrió a las 4 de este domingo en el Acceso Este y Urquiza, cuando Mariano Abel Pérez, de 53 años, circulaba en dirección hacia el oeste, pero utilizando el carril contrario.
Al llegar al Urquiza el Fiat Palio, dominio FXC-777, que conducía Pérez, impactó de frente con un Chevrolet Corsa (GTW-700), que era manejado por Pedro Ernesto Landeros, de 49 años y lo hacía por la mano correspondiente, pero en sentido contrario.
Como consecuencia del impacto frontal, el Palio se prendió fuego y Pérez murió en el interior del mismo, mientras que Landeros debió ser trasladado al hospital Central, donde se le diagnosticó traumatismo encéfalo craneano grave y pérdida de conocimiento por lo que tras las primeras curaciones quedó internado en la sala de terapia Intensiva.
La situación había sido adevertida al 911 por otros automovilistas. Interviene la Oficina Fiscal Nº 19 y la Comisaría 35.
Otros tres trágicos hechos
El 31 de agosto de 2009, un hombre de 31 años que conducía su camioneta Toyota Hilux 4x4 en contramano por el Acceso Este, a la altura del puente sobre calle Dorrego, en Guaymallén, se dio de frente contra un Renault 11 que circulaba en forma correcta. Como consecuencia del choque murió una mujer.
El conductor era Juan Pablo Higuera y la víctima se llamaba Silvia Vicario de 50 años. A raíz del tremendo impacto también resultó herido Pablo Guzmán (61) esposo de la mujer y conductor del automóvil menor.
Sin embargo ese hecho tuvo un desenlace no imaginado y hasta ahora sin resolución judicial.
Comprobado que Higuera conducía en estado de ebriedad fue detenido y la calificación de homicidio culposo (como generalmente se determinan los accidentes de tránsito) se pasó a la de homicidio simple (que tiene una pena de 8 años o más) y el hombre fue alojado en el penal mendocino.
Pero al tiempo pagó una fianza de 20 mil pesos lo que le permitió cambiar la celda de la cárcel por la comodidad de su casa, al otorgársele el beneficio de la prisión domiciliaria. Pero esa situación varió totalmente cuando el 29 de diciembre se comprobó que había violado el beneficio y fue declarado prófugo de la Justicia.
En esa condición se mantuvo hasta que se anunció que Higuera había sido detenido por una comisión policial en la provincia de Chubut y hasta allí se lo fue a buscar y terminó preso una vez más, pero no fue por mucho tiempo sino que al realizarle las pruebas dactilares se comprobó que ese Higuera no era el mismo que había estado detenido en 2009 y, quedó desvinculado del hecho.
El otro hecho se registró el 11 de febrero de 2013, cuando Adrián Ocampo, a bordo de un Renault 19, salió de una estación de servicio de Rodeo de la Cruz, acompañado de dos personas, y comenzó a circular por el Acceso Este de contramano.
Anduvo entre 500 y 700 metros, siempre en dirección contraria, y unos metros antes de llegar al cruce con la ruta 50 protagonizó el primer percance con un Peugeot 504. que afortunadamente logró esquivarlo.
Pero detrás venía un Peugeot 405 en el que viajaban Juan Manuel Viudez (62) y su hija María Laura (39). El conductor no vio o no pudo esquivar al Renault 19. Los autos chocaron frontalmente. El hombre quedó atrapado en el habitáculo y murió horas más tarde en el hospital Central. Su hija fue despedida del auto por el choque y falleció en el lugar.
Valeria Gutiérrez, venía detrás, a bordo de un Fiat 147, y logró esquivar a los autos siniestrados, rozó a uno y se detuvo al costado del camino.
La mujer trató de hacerles señas a los vehículos que circulaban hacia el oeste pero Camilo Pacífico, conductor de una camioneta Nissan Frontier, no la vio o no pudo esquivar a los vehículos y terminó impactando en un costado del Peugeot 405.
Finalmente, dentro de esta apretada síntesis, el 7 de febrero del año pasado se registró el más grave de todos, cuando sobre la ruta 7, en jurisdicción de San Martín, un camión brasileño que circulaba contramano a 120 km/h embistió frontalmente a un colectivo proveniente de Córdoba, dejando como trágico saldo la de 16 personas fallecidas.
