Si de explicar su obra se trata, Guillermo Rafael "MicA" Priori dirá: "Yo busco un objeto, lo asocio a otro y de ahí surge una composición". Desde la vuelta de la democracia el hombre, tan calvo como alto, suelta su vocación de artista y se regodea en el plano de las ideas para darle forma, vida o luz a lo que parecía ya muerto, olvidado y oscuro.
"MicA", el sobrenombre que recibió de niño en boca de un amigo que tardaría poco en morir, es el padre de dos hijos, el ex integrante del colectivo mendocino Trío Poroto, el abogado especialista en telecomunicaciones, el hijo de una ama de casa sensible que terminó la primaria de grande y de un padre con un gran sentido del humor dueño de una carnicería en Godoy Cruz. Es también el autor de las obras que se exponen en el Espacio Cultural Julio Le Parc, con motivo de la apertura de su segunda temporada-aniversario con el ciclo Veraneo 2014. Es el ganador de un premio que no existe y el creador de una fuente montada con autos del desarmadero, por el que circula a diario en su recorrido Ciudad-Maipú.
A los 57 años y luego de un recorrido que considera suficiente en el terreno judicial, Guillermo piensa colgar el traje un buen día y dedicarse de lleno al arte. Los expedientes no atendidos serán horas destinadas a trabajar en un taller que planifica en Buenos Aires. "En la abogacía, al igual que en el arte, existe una necesidad de decir, de reclamar algo, son herramientas muy interesantes para hacerlo.
Y si en la abogacía muchas veces he dicho cosas en nombre de otros, en el arte tengo la oportunidad de decirlas por mí mismo", reflexiona. De eso se trata: de experimentar, como lo hace en "Max MicA", la muestra en la que expone "Ascensor de granja" (2013), un mueble con audio, luz y plumas diseñado para que suban y bajen gallinas y patos; "La caída de un ídolo" (2010), un objeto intervenido con tela y yeso que ridiculiza al superhéroe Batman; "Viaje" (2010-2012), un cortometraje de 13 minutos a bordo de un auto; o "Me miro bien", el Premio Plumas y Escamas del Elespario que además de no haber ganado jamás, no existe.
"MicA afirmaba que, durante un prolongado tiempo, su funcionamiento como productor artístico se asemejó al del francotirador. Cuando lo invitaban a participar de algún evento, entonces él enfocaba, apuntaba y disparaba una obra. Ahora parece que sus tiempos son otros, y entonces considera el clima, su disposición anímica, las posibilidades de lluvias, de vendavales e incluso tiene en cuenta las noticias del día antes de disparar.
Estas maneras de encarar la producción definen dos procesos creativos muy visibles que, junto a la selección y manipulación de objetos encontrados y al carácter performático que reviste un grupo de sus producciones, imprimen un sello singular", escribe la licenciada en Artes Plásticas e Historia del Arte, Roxana Jorajuria. La rareza que envuelve a los objetos, el humor aplicado en sus intervenciones y la consideración del público que enfrentará la obra, son para Jorajuria elementos de esa particularidad a la que se refiere. También lo son el absurdo, la transformación del desecho y la construcción de un relato cargado de asombro.
Guillermo Priori, el autodidacta, el alumno del secundario que buscó una función tan extraña como ser encargado de la Sala de Mapas Geográficos para librarse de obligaciones académicas, el compañero y amigo de un joven Eduardo Hoffmann, que le contagió su curiosidad por el arte y con el que más tarde integró el Trío Poroto junto a Javier Segura; un proyecto de intervención experimental e improvisación con objetos y residuos muchas veces encontrados de la calle. El que disfruta de las horas en su casa, que más que libres son de descubrimiento.
Al calor de las artes
A las obras de MicA Priori en el Le Parc se suman otras imperdibles: una video-instalación del director viajero Tito de la Vega y la tercera edición de "Distancia Focal", que reúne a artistas locales con propuestas variadas para conocer el estado del arte contemporáneo. En el caso de Tito de la Vega, se trata de un proyecto ficción en espacio 3D donde los personajes son hologramas encarnados en pequeñas esculturas vivientes.
Un locutor "trucho" como columna vertebral invita a los televidentes a apadrinar un árbol. El discurso publicitario será luego interrumpido por los rayos, que develan la mirada crítica del director sobre el universo mediático con una instalación formada por objetos sin luz y una imagen fragmentada. Una vez más, el arte experimental del plástico, videasta y documentalista mendocino vuelve a sorprender con una obra que recomendamos visitar.
En el caso de "Distancia focal", es una invitación a descubrir el espacio a través de exposiciones individuales que conforman una gran muestra colectiva. En el primero piso del espacio cultural, el visitante podrá indagar en la propuesta de los artistas Andrea Barrera Mathus, Ramiro Quesada Pons, Marcos Mut, Proyecto Ojo de Adriana Puebla con la invitación especial de Diego Pelaia, Mariano Peccinetti, Cristóbal Farmache Delhez, junto a los colectivos artísticos Cerda (Tatiana Scoones Bettinardi, Alfredo Dufour, Agostina Francese Zingaretti y Jimena Losada Lacerna) y Visual Objeto - A, que invita a transitar los límites a partir de cómo miramos y cómo somos mirados. A estas exposiciones se suma una agenda repleta de teatro, danza, circo y cine. Los horarios de visita son de 17 a 23 hs (cerrado los lunes).