El poder electoral de Venezuela postergó para 2017 las elecciones de gobernadores que debían realizarse a fines de 2016, aumentando la tensión política a una semana de la recolección prevista de las firmas necesarias para convocar un referéndum revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro.
“Las elecciones regionales (gobernadores) quedan establecidas para finales del primer semestre de 2017”, informó la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, a través de la televisión estatal.
Por mandato constitucional, los comicios de gobernadores deberían celebrarse a finales de año al cumplirse el cuatrienio para el cual fueron elegidos en diciembre de 2012.
Lucena no explicó las razones del aplazamiento y tampoco hizo mención al proceso de referendo. Sólo añadió que las elecciones municipales se celebrarán en “el segundo semestre de 2017”, como estaba previsto, y en marzo y abril las primarias de las organizaciones políticas.
La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que ganó en forma arrasadora las legislativas de diciembre pasado, no reaccionó aún a esos anuncios.
Dirigentes chavistas ya habían deslizado la posibilidad de la postergación de las elecciones regionales.
Hace dos semanas, Maduro dijo que organizar elecciones no era una prioridad en Venezuela, sino “recuperar la economía”, pues el país petrolero atraviesa una severa crisis agravada por la caída de los precios del crudo, fuente de 96% de sus divisas.
Otros líderes oficialistas también habían señalado que mientras siga el proceso del referéndum revocatorio que solicita la oposición no podían celebrarse elecciones.