La tala de árboles en distintos distritos de Tupungato despertó una ola de reclamos de vecinos a través de las redes sociales y en las oficinas gubernamentales.
Que muchos ejemplares no aparentaban estar enfermos y que la población del lugar no fue consultada ni avisada respecto de la medida fueron situaciones que agravaron el malestar. Pero desde Recursos Naturales sostienen que autorizaron la erradicación para evitar accidentes.
"Parece que vamos a tener que cambiarle el nombre y empezar a llamar La ex Arboleda", ironizó un tupungatino a través de Facebook. Sucede que las cortinas verdes a ambos lados de la ruta fueron históricamente señales con las que se identificaba a este distrito y a su vecino, El Zampal. Sólo en esta área, la cantidad de árboles cortados supera los 60.
"Nadie controla. Van sacando árboles sanos y enfermos por igual. He dejado la denuncia en Recursos Naturales y allí me mandan a hablar con Vialidad. Es parte de nuestro patrimonio departamental pero nadie sabe bien qué está pasando", expresó ofuscada Elena G., una vecina de El Peral.
Algunos de los puntos donde la erradicación ha sido más invasiva -según apuntan los denunciantes- son: la calle Iriarte de El Zampal, en La Arboleda, en la calle La Costa de El Peral y en el callejón Amin al llegar a calle La Gloria.
"Tengo pedidos para erradicar ejemplares en la calle Iriarte desde hace diez años. Constituyen un peligro para las personas, ante vientos fuertes o tormentas. Se genera una disyuntiva porque debemos proteger los árboles, pero también evitar accidentes", explicó Miguel Firpo, inspector de Recursos Naturales encargado de supervisar el arbolado en Tupungato.
Desde esta oficina salió la autorización para algunas de las cuestionadas talas. Firpo explicó que son muchas las razones. Señaló que algunos ejemplares tenían la base quemada ("a veces la gente no alcanza a percibir la magnitud del daño que le provoca a la planta"), otros tenían taladrillo -enfermedad que es difícil de detectar para el ojo inexperto- y otros estaban secos.
Firpo adelantó que, desde su área, han programado una tala completa en esa calle, a realizar en los siguientes cuatro años. El riesgo que implica el mal estado de estas plantas para las familias de la zona es el principal motivo. Incluso, existen denuncias de productores a quienes las ramas le han destrozado hileras de viñas.
Por su parte, Roberto Hurtado, titular de Servicios Públicos de la comuna, dijo haber recibido quejas al respecto. Explicó que la erradicación en calle La Gloria responde a la futura construcción de un espacio público y peatonal. Sin embargo, reconoció que -a veces- se solicita la extracción de una planta y se extraen más.
Esta situación es la que preocupa a los integrantes de la Asamblea por el Árbol de Mendoza. La ingeniera Teresita Cappezone recordó que desde "Vialidad han reconocido que pagan con madera sana a los privados a quienes solicitan la tarea. Esto hace que se terminen cortando ejemplares sanos. Es una barbaridad", expresó.
La ley provincial 7.874 del "Régimen de preservación y control de arbolado público" dispone que sólo Recursos Naturales es competente para autorizar la tala de un árbol.
A los demás organismos (municipios, Vialidad, etc.) corresponde el mantenimiento y la reposición de los que se extraen. Las organizaciones sociales y gubernamentales coinciden en que el tema de la replantación es lo que hoy está fallando.