Alejandro Vandenbroele, el supuesto testaferro del ex vicepresidente Amado Boudou que eligió Mendoza para instalarse, cerca de su hija Poline (9), fue ingresado ayer transitoriamente al régimen de testigos protegidos, también aplicable a imputados colaboradores, y en la justicia aguardan que declare como "arrepentido".
Fuentes oficiales confirmaron que Vandenbroele fue ingresado al Programa de protección de imputados colaboradores luego de una reunión que mantuvo con uno de sus abogados defensores y con el fiscal federal Jorge Di Lello.
"Ya es es parte del Programa, ahora viene el proceso de arrepentimiento", informaron fuentes oficiales.
Vandenbroele fue retirado de Comodoro Py a las 19 con una fuerte custodia y, según fuentes oficiales, lo llevaron a un "hogar protegido" porque se encuentra en una instancia "preliminar" del Programa al que pidió acogerse y "corresponde aumentar su seguridad".
La Ley del Arrepentido establece que el imputado que colabore con la investigación podrá conseguir una reducción de pena, negociada previamente con la fiscalía, toda vez que en el proceso judicial se constate la veracidad de la información aportada.
"La información que se aporte deberá referirse únicamente a los hechos ilícitos de los que haya sido partícipe y a sujetos cuya responsabilidad penal sea igual o mayor a la del imputado arrepentido", sostiene el texto de la norma.
El juez federal Ariel Lijo, o el fiscal Di Lello, tendrán hasta un año para "corroborar el cumplimiento de las obligaciones que el imputado arrepentido hubiera contraído en el marco del acuerdo, especialmente la verosimilitud y utilidad, total o parcial, de la información que hubiera proporcionado".
Vandenbroele llegó a los tribunales porteño de Comodoro Py, en el barrio porteño de Retiro, a las 14, mantuvo una reunión de 90 minutos con Di Lello y se quedó hasta tres horas y media más en el edificio reunido con los tres defensores oficiales que lo asisten en las distintas causas.
Si bien desde la fiscalía se negaron a dar detalles de la reunión, fuentes de los tribunales federales de Comodoro Py aseguraron que fue allí que Vandenbroele hizo el pedido de ser ingresado al programa de protección de imputados colaboradores.
Sin abogado
Durante su charla con Di Lello, Vandenbroele pidió interiorizarse sobre el estado de las causas en su contra e informó que había dejado a su abogado privado, por lo que el fiscal pidió que estuviera presente alguno de los letrados oficiales.
Ante la presencia del defensor oficial Juan Martín Vicco, el imputado y el fiscal firmaron un acta del encuentro, que se incorporará a los expedientes en los cuales está investigado el primero.
Vandenbroele está acusado de ser el testaferro del ex vicepresidente Amado Boudou y de haberle prestado el nombre para que se quedara con la imprenta con capacidad para imprimir billetes Ciccone Calcográfica, luego de que denunciara toda la trama su ex mujer y madre de su hija, Laura Muñoz, quien luego de contar todo se radicó en Mendoza.
Dueño de la firma The Old Fund, que se quedó con Ciccone antes de su estatización, también es investigado por la participación de esa empresa en la renegociación de una deuda de la provincia de Formosa y el Estado.
Como supuesto testaferro de Boudou, también está siendo investigado en la causa por enriquecimiento ilícito por la que el ex vicepresidente y su socio José María Núñez Carmona fueron detenidos hace 10 días.
Vandenbroele ya está siendo juzgado en juicio oral, junto con Boudou y otros imputados, en el caso Ciccone; mientras que una parte de la misma causa -la que ventila el origen del dinero- está todavía en etapa de instrucción.
En más de una oportunidad, incluso la semana pasada en el juicio oral por Ciccone, el ex vicepresidente aseguró que no conocía a Vandenbroele.