El argentino Gustavo Fernández cayó ayer por 7-6 y 6-4 el japonés Shingo Kunieda, primero del ranking de la especialidad, en la final de tenis en silla de ruedas del Abierto de los Estados Unidos.
Para llegar a esta instancia, Fernández (4), hijo del ex basquetbolista Gustavo Fernández y que había sido número 1 del mundo junior de esta categoría, derrotó al francés Stephane Houdet (2) por 7-6 y 6-1.
Mientras que Kunieda en la restante semifinal había vencido al francés Nicolas Pfeifer por 7-5 y 7-6 (7/5). El cordobés, de 20 años, no pudo lograr su primer título de Grand Slam y volvió a perder en la definición de un torneo de esta categoría, como en el Abierto de Australia donde también cayó frente al japonés, líder del circuito de tenis adaptado.