Uno de cada cuatro pesos que obtuvo el Estado durante el primer semestre a través de ingresos corrientes fue asignado a cubrir subsidios, según se desprende de datos que informó el Ministerio de Economía.
Los ingresos corrientes del fisco entre enero y junio fueron de 606.8215,1 millones de pesos, mientras que las transferencias corrientes al sector privado treparon a 147.738 millones de pesos.
Esto implica que el 24,4 por ciento de los ingresos tuvo que ser girado para financiar aportes del Estado en el sector privado, en particular al sector energético y de transporte.
El nivel de subsidios creció en el primer semestre de 2015 un 38 por ciento respecto al mismo período del año pasado.
La expansión de los subsidios es 10 puntos superior a la de los ingresos que en el mismo período crecieron 28 por ciento.
Las cifras surgen de la información de Cuentas Públicas que el Ministerio de Economía difundió anoche pasadas las 11 de la noche con el objetivo de minimizar un déficit fiscal superior a los 107 mil millones de pesos.
El rojo de las cuentas públicas entre enero y junio se triplicó con relación al 2014 al llegar a 107.135,8 millones de pesos -resultado financiero-, sin contar aportes adicionales por parte de organismos descentralizados por 51.764 millones de pesos.
Sin ese oxígeno el desequilibrio hubiera trepado a 158.900,6 millones de pesos.
En tanto, el resultado primario -luego del pago de intereses de la deuda- mostró en el período un desfase de 46.594 millones de pesos, contra un saldo favorable de 2.203,1 millones de pesos que se produjo en 2014. Cabe apuntar que aún se mantienen pendientes de pago unos 2 mil millones de dólares correspondientes al litigio con los holdouts, lo que incrementaría este desequilibrio.
El bache fiscal se explica por un aumento del gasto 10 puntos superior a la expansión de los ingresos.
Las erogaciones del primer semestre treparon a 630.415,4 millones de pesos con un alza de 38 por ciento. En contrapartida, los ingresos fueron de 606.825,1 millones que representa una mejora de 28 por ciento. Los aportes extraordinarios de 51.764 millones de pesos, representan el 3,5 por ciento de los ingresos totales del fisco y mantuvieron el mismo nivel respecto del primer semestre de 2014.
La ayuda se dividió de la siguiente manera: 26.635 millones de pesos del Banco Central, 23.970 millones de ANSES, 1.077,2 millones de PAMI y 76,5 millones de organismos descentralizados.
El fuerte desequilibrio de las cuentas públicas está siendo financiado con colocaciones de deuda en el mercado doméstico ante la imposibilidad de realizar colocaciones en la plaza internacional.
A la fecha, el Ministerio de Economía lleva emitidos bonos en pesos por 118 mil millones de pesos.
Analistas privados calculan que el déficit público de 2015 se ubicará entre el 6 y el 7 por ciento del PBI.