Por segundo año consecutivo los días de paro en los colegios dependientes de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) suman casi un mes. Es que los docentes nucleados en Fadiunc reclaman desde marzo una mejora en sus salarios y no han obtenido una respuesta satisfactoria.
En un principio la manifestación se centró en la apertura de la discusión salarial, luego en mejorar la propuesta recibida y en este último caso -un paro por 48 horas que empezó ayer- en repudio al cierre de la paritaria que excluyó a la Conadu Histórica, federación que representa al gremio local.
En el medio de la discusión los estudiantes llevan 20 días sin asistencia a las aulas, ante la preocupación de los padres y los esfuerzos para readaptar los contenidos por parte de directivos y profesores. “Los contenidos que perdemos nos los dan igual, pero todo junto y mucho más rápido”, contó un grupo de alumnos del colegio Magisterio que tuvo ayer a la única educadora que asistió a clases.
Una forma alternativa que encuentran algunos docentes es mandar material de trabajo a través de las redes sociales. “No todos, pero algunos profes nos mandan actividades por Facebook y también nos van avisando las fechas en las que vienen y en las que no”, detallaron los chicos que forman parte de Kawana 16, conjunto que se postulará para el centro de estudiantes de ese establecimiento.
Recordando la situación similar que vivieron el año pasado manifestaron: “En general a nosotros nos gusta perder clases, pero el año pasado ya queríamos volver a tener porque al final es peor”, reconocieron, a la vez que una de las chicas recalcó que le fue muy mal en 2014 porque tuvo muy poco tiempo para adquirir los conocimientos necesarios para rendir.
Desde la institución, Héctor Farjos, director general de Apoyo Académico, explicó que se ha tomado una política de recuperación de contenidos. “Es muy importante en este punto porque estamos en la etapa de cierre del trimestre”, destacó a la vez que reconoció el desafío que tendrán los docentes para la compensación posterior.
Con respecto a la reacción de los padres, el directivo aseguró que no han llegado a un punto de conflicto. “A nadie le agrada un paro, pero en un punto los padres terminan comprendiendo la situación”, expuso.
En la puerta del Colegio Universitario Central (CUC), Juan Bautista Castellino esperaba a su nieto que cursa primer año. “Los paros se originan por reclamos salariales justos, pero siempre traen complicaciones a los padres y también a los abuelos”, manifestó el hombre a la vez que remarcó que en el caso de estos paros, no les generan tantos inconvenientes porque son avisados con tiempo.
En tanto que Susana Oliva, vicedirectora del establecimiento, precisó cómo accionan ellos para recuperar los contenidos. “Se realiza un análisis de saberes y se hace una readaptación de la planificación en los distintos cursos”.
La directiva también contó que allí tuvieron 80% de acatamiento y que se citó a los alumnos cuyos docentes confirmaron asistencia. “Organizamos las clases de los profes que sí vienen de forma que los chicos, aunque vengan por dos horas, no tengan tiempo libre”, detalló.
Al respecto también opinó Fabiana Pacheco, madre de un alumno del CUC y también profesora en el Martín Zapata. “Es una vergüenza lo que nos han propuesto de aumento y encima dejaron afuera la Conadu Histórica”, se quejó la docente que apoya esta iniciativa como una forma de ser escuchados. “Lamentablemente vemos que no tiene mucho efecto”, apuntó.
Desde el Liceo Agrícola, el director Mario Fráncica comentó que la adherencia a la medida de fuerza fue muy alta. “Lo que ha hecho la escuela a través de los jefes de área es trabajar con los profesores para recuperar los días perdidos dentro de las posibilidades que tenemos”, precisó al respecto de la recuperación de contenidos. Una opción a la que acuden algunos docentes es a la utilización de un programa informático con el que cuenta la institución que busca mantener un diálogo permanente con el chico y la familia.
“Como una forma secundaria algunos profes suben el material de estudio o de trabajo de forma que los chicos puedan hacer las tareas en la casa”, informó el directivo a la vez que destacó que esa estrategia depende de cada docente.
Por otra parte, los papás de la primaria Carmen Vera Arenas que el año pasado evaluaron presentar una medida judicial para que se retomaran las clases, están en esta oportunidad mas aliviados.
“El año pasado fue catastrófico, los chicos estuvieron 25 días seguidos de paro, pero ahora sólo hemos tenidos 6 días de paro y mucho más distribuido”, relató Fernanda, mamá de un alumno de 3er grado. Ella contó que muchas veces los profesores del colegio han decidido no adherir a las medidas de fuerza: “Creo que han sido más prudentes”, consideró.
En repudio
Mario García, secretario general de Fadiunc, precisó que en lo que va del año ya cuentan 20 días de paro y que esta última medida de 48 horas se decidió en repudio del cierre de la paritaria por parte del Gobierno nacional y otros gremios de la educación en la que quedó excluida la Conadu Histórica, federación de la que forman parte.
“Cerraron la paritaria con el salario a la baja, se resolvió 27% en dos cuotas, sin retroactivo, ni remunerativo”, detalló el gremialista. “Pero no sólo eso, sino que firmaron abolición del artículo 42 del convenio colectivo, que establecía la jerarquización docente del 5% por año para todas las categorías, sumando un 25% en 5 años”, añadió.
Ellos se enteraron el 29 de mayo de esta situación y el 2 de junio en plenario se decidió manifestarse en contra.