Durante este fin de semana largo visitaron la provincia unas 48 mil personas y se alcanzó una ocupación hotelera promedio de 83%. Así se fijó un nuevo récord para un 1° de mayo, que registraba una media histórica de 60%. Mendoza fue uno de los tres destinos más elegidos en el país, junto con Salta y Cataratas del Iguazú.
Ya el viernes, el nivel de reservas anticipaba que se iba a tratar de un fin de semana muy positivo para el sector turístico. Luego, el Ente Mendoza Turismo dio a conocer que, efectivamente, todo el territorio provincial recibió un número significativo de visitantes. El Gran Mendoza alcanzó una ocupación de 85%; la zona Sur, de 80%; el Valle de Uco, de 75%: y alta montaña, de 62%.
Asimismo, informaron que la estadía promedio fue de 3,5 días y el gasto medio diario de 1.300 pesos por persona. La mayor cantidad de turistas llegó desde Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, el litoral y provincias limítrofes. Sin embargo, también se notó la presencia de visitantes extranjeros, de Chile, Brasil y, en menor medida, del resto mundo.
El 83% de ocupación sorprendió no sólo porque superó ampliamente a la media histórica para este feriado -que como es inamovible, no siempre genera un fin de semana largo-, sino también porque se dio apenas un mes después del receso extra largo, de cinco días, por Semana Santa y el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas (cuando casi se completó la capacidad hotelera).
Desde el Emetur indicaron que aunque el nivel de reservas era alentador, el arribo de turistas de modo espontáneo hizo crecer el número de visitantes, que no sólo se alojaron en hoteles, sino también en casa de parientes y amigos. En total, se estima que fueron unos 48 mil los viajeros que recorrieron la provincia en estos cuatro días.
En cuanto a los motivos de este crecimiento, mencionaron la promoción permanente del destino en los principales mercados emisores, la mayor conectividad aérea con vuelos directos, el buen pronóstico del tiempo y la agenda de actividades artísticas y culturales en diversas partes del territorio.
A esto se suma el cambio del comportamiento del viajero, que abandonó las vacaciones anuales de 15 días para preferir varias escapadas de fin de semana a lo largo del año.
Se trató del primer fin de semana de 2018 en que se aplica la nueva ley de feriados y días no laborables. A diferencia de los anteriores puentes turísticos, que eran feriados, el lunes fue no laborable, por lo que cada empleador pudo definir si otorgaba -o no- el día a sus empleados.
Esta situación se repetirá en diciembre, cuando se darán los próximos fines de semana largos de cuatro días (los restantes del año serán de tres jornadas). Para Navidad, se fijó el lunes 24 como puente no laborable, por lo que el receso se extenderá -para algunos- desde el sábado 22 hasta el martes 25 de diciembre. Y para Año Nuevo, el lunes 31 será el puente, para definir un descanso desde el sábado 29 de diciembre hasta el martes 1 de enero.
Paso internacional
El regreso a casa desde Chile el último día del fin de semana largo parece no presentar complicaciones. Desde Gendarmería Nacional detallaron que en Horcones los vehículos particulares tienen una espera de 30 minutos, mientras los colectivos de apenas 10 minutos. Están habilitados seis puestos para la atención de Migraciones e igual número para Aduana. La temperatura, a las 18, era de 7°.