Una línea de cinco volantes puso en cancha Maipú para plantarse firme en esa zona y golpear rápido, en los primeros minutos. Iban 2 minutos, Coria se saca un hombre de encima y saca un zapatazo magnífico. Golazo formidable del Pampero que ha vuelto a ser el Pampero que supo deslumbrar a todos.
El problema del Cruzado estaba de la mitad para atrás. No defendía bien y sufría en cada embestida del local. Por eso no extrañó que a los 8 minutos lo empatara Décimo. Unión no era un lujo en el fondo tampoco. Una grosería de Martínez terminó habilitando a Sánchez, quien cambió por gol con gran calidad.
Pero el Cruzado no se iba a ir ganando al entretiempo porque Décimo iba a volver a poner las cosas como antes. Para el complemento iba a aparecer ese Maipú de mil batallas, zorro de la categoría.
Gran mano del entrenador que acertó en los cambios y le tiró al debutante Unión toda su sapiencia en el Federal A. El Cruzado fue inclinando la balanza a su favor y se hicieron gigantes Imbesi y Benítez. Maduraba el nocaut.
Coria mete un centro cargado de veneno al área, Delorte mete la cabeza, la pelota se desvía en el camino y otra vez los mendocinos arriba en el marcador. Y esta vez no la iban a dejar pasar. Gordillo, a 6’ del final, le puso el moño a una victoria intachable. El Cruzado mostró credenciales y le tiró la chapa al Azul. Es un grande de la categoría y nunca hay que darlo por muerto.
