Los cuidadores de Sheldrick Wildlife Trust, una organización sin fines de lucro y una de las organizaciones conservacionistas más antiguas y pioneras del Este de África, se visten de rayas para hacer sentir segura a una cría de cebra que se quedó huérfana.
El centro se caracteriza por llevar a cabo soluciones innovadoras entre las que se encuentra vestir a sus cuidadores con una camiseta de rayas blancas y negras.
Los potros necesitan poder reconocer a su madre desde el nacimiento para poder sobrevivir. El objetivo es que Diria identifique ese atuendo con su "madre" y no relacione únicamente a una persona con esa tarea, de tal forma que todos los cuidadores del centro puedan ir turnándose y encargarse de sus atenciones sin que ella eche en falta a nadie en particular.
Una técnica que el centro ha estado empleado con éxito a lo largo de los años con otras cebras rescatadas, que ahora viven salvajes.
La pequeña Diria tuvo un comienzo difícil en la vida después de que su madre muriera a manos de un grupo de leones en el Parque Nacional Tsavo East, en Kenia. Milagrosamente, la cría escapó del ataque escondiéndose en un rebaño de cabras cercano.
El pastor de ese rebaño se encargó de atenderla antes de ser trasladada a la Unidad de Reintegración de Sheldrick Wildlife Trust, donde ahora recibe los cuidados y las atenciones necesarias para garantizar su supervivencia.