Una mujer de 67 años dio a luz en Grecia a su propia nieta mediante gestación subrogada, convirtiéndose en el primer caso en el mundo de una madre sustituta de tan avanzada edad, según fuentes médicas locales.
La madre natural padecía una rara enfermedad de útero que la obligó a someterse a una histerectomía, y antes de la operación se le extrajeron óvulos que fueron fertilizados con los espermatozoides del marido, según consignó hoy la agencia de noticias Efe.
Al no poder ser ella misma la gestante, su propia madre se ofreció como madre sustituta, lo que además de exhaustivos análisis médicos requirió de un permiso judicial especial.
El límite de edad en Grecia para la fecundación in vitro es de 50 años, pero no se establecieron topes para la gestación subrogada.
Konstantinos Pantos, el médico que atendió a la embarazada, opinó que por un lado es necesario elevar el límite de edad de las madres que se someten a tratamientos in vitro, porque la esperanza de vida aumentó, pero por el otro, se debería imponer un techo para las madres de alquiler, para así evitar posibles riesgos para las mujeres de edad avanzada.
Tras sufrir una subida de tensión arterial, la gestante tuvo que dar a luz mediante cesárea en la trigésima primer semana del embarazo.
En declaraciones a los medios locales, la parturienta, que al igual que el bebé se encuentra en perfecto estado, afirmó que no se sentía como una madre sino "como una doble abuela", y aseguró que había tomado la decisión de ayudar a su hija sin pensarlo dos veces y sin importarle las opiniones de los demás al respecto.