El tratamiento funcionó, fue exitoso conmigo", celebra Alejandra Orellana de 53 años que pasó dos meses internada en el Hospital Posadas, donde le administraron hidroxicloroquina, el medicamento que propuso el polémico infectólogo francés Didier Raoult para combatir el coronavirus.
Alejandra había ingresado el 7 de marzo, fue la paciente numero 1 del establecimiento sanitario ubicado en la localidad de Morón y recibió el alta el pasado miércoles.
La mujer es abogada y aseguró que un día estaba atendiendo a mis clientes y al otro debieron internarla: "Por suerte ningúno de los que trabaja conmigo se contagió".
Cuando llegó a la guardia la aislaron de inmediato por ser asmática y por antecedente de un viaje familiar por Europa. Había recorrido España e Italia junto a su marido, el secretario de Hacienda del municipio de San Pedro, Fabián Rodríguez, quien también tuvo coronavirus.
Alejandra confesó que la pasó muy mal, con episodios de alucinaciones, planes de escape y delirios: “Sé que que le di mucho trabajo al equipo del Posadas. Fui una paciente difícil”, compartió.
“Me dijeron que estaba muy grave. No lo podía creer porque no había tenido tos, ni estaba resfriada, ni había tenido ninguno de los síntomas”, relató la mujer que estuvo cinco semanas en terapia intensiva y 40 días con asistencia respiratoria.
“Estás en el limbo pero no te rendís. No te vas. Yo viví el coma farmacológico como si estuviera en una lucha. Los médicos me ‘traían’, me hacían reaccionar, me hablaban. Ellos nunca me dejaron sola”, dijo agradecida.
“No sabían si iba a zafar o no” y la etapa más dura fue cuando “despertó”.
"Cuando vi el primer amanecer me puse a llorar. No pensé que iba a volver a verlo. Lo mismo cuando ví a mi marido y a mi hija”, relató.
Y luego de una pausa realizada por las lágrimas y la emoción, continuó: “Me dijeron que estaba muy grave. Me llevaban por la noche a hacerme tomografías, por los pasillos del hospital, con los tubos de oxígeno. Entonces, la gente del Posadas me propuso hacer este tratamiento".
"Yo lo consulté con mi marido y entre los dos decidimos que sí. Porque era una alternativa para ver si podía sobrevivir a esto. Y por suerte resultó. Pero resultó porque el equipo médico nunca me soltó la mano. Siempre estuvo conmigo”, sostuvo.
Ante la consulta de si tuvo miedo de participar en un estudio experimental, respondió: “No estaba pensándolo. Sabía que era eso o morirme. Así que confié en mi médico, que pensaba que este era el camino. Yo confié en la ciencia y confié en Dios”.
El infectólogo francés Didier Raoult era noticia -entonces- por su revelación. Y la Argentina uno de los diez países elegidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para probar alternativas de terapias, incluida la hidroxicloroquina.
Por su parte, el director ejecutivo del hospital, Alberto Maceira, celebró en un comunicado el alta de su “primera paciente” con COVID-19. En total, en este centro médico asistieron a 22 personas con coronavirus.
Alejandra recibió el alta el miércoles, con derivación a un centro de rehabilitación motora que queda cerca de su casa. Allí estará sola en aislamiento por 7 días, por protocolo COVID-19, hasta obtener un nuevo hisopado.
No puede caminar. Realiza sesiones de kinesiología en su habitación para recuperar el tono muscular. Después de la semana de aislamiento, podrá continuarlas en el gimnasio y también recibir breves visitas de su familia. En total, pasará ahí unos 30 días.
Para finalizar, no quiso dejar un mensaje: “Se difunde tanto la muerte... Pero también hay casos como el mío. También existe gente que se salva, gracias a la idoneidad de nuestros médicos. Ellos me cuidaron, la salud pública me cuidó. Quiero destacar que se puede salir adelante y se puede sobrevivir".