Sociedad
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hace 5 horas
Un joven es víctima de un extraño síndrome que le hace producir alcohol, como si fuera una "fábrica humana de cerveza". Y aunque para muchos se lea bizarro, en realidad se convirtió en un problema para este hombre estadounidense durante más de seis años.
La revista New Scientist reveló el caso del muchacho, quien en 2011 comenzó a quejarse por pérdida de memoria, episodios de depresión, comportamiento agresivo y cambios mentales. Al principio lo sometieron a una terapia con antibióticos, ya que los síntomas habían aparecido luego de una lesión en el pulgar.
Sin embargo, las causas no salían a la luz. Hasta lo trataron con antidepresivos por recomendación de un psiquiatra, pero sin éxito. El estado de salud comenzó a complicarse, y el joven fue arrestado por presunto manejo en estado de embriaguez. Se rehusó a la prueba del alcoholímetro y fue hospitalizado.
De acuerdo con RT en español, las pruebas clínicas revelaron un nivel de alcohol en la sangre de 200 miligramos por decilitro (mg/dL), un valor equivalente al consumo aproximado de 10 cervezas y capaz de producir confusión, desorientación, dificultad de hablar y deterioro del equilibrio. Pero el hombre insistió en que estaba sobrio. Claro que el personal médico se negó a creerle.
Finalmente, el sujeto obtuvo respuesta en una clínica de Ohio, donde pruebas de laboratorio revelaron la presencia en su intestino de Saccharomyces cerevisiae, un hongo unicelular conocido como levadura de cerveza, capaz de fermentar carbohidratos y convertirlos en etanol.
El joven padecía del síndrome de fermentación intestinal (ABS, por sus siglas en inglés), una enfermedad rara vez diagnosticada en la cual se producen cantidades intoxicantes de etanol dentro del sistema digestivo. Como tratamiento, fue sometido a una estricta dieta libre de carbohidratos.
Como luego tuvo algunas recaídas, expertos de la Universidad de Richmond (Virginia) asociaron los síntomas a su previa exposición a antibióticos y decidieron utilizar una combinación de terapias antifúngicas y probióticos para tratar la microflora intestinal.
