Una ex vecina de Fede Bal dijo que en su casa sólo había “joda, alcohol y olor a porro”

La mujer acusó malos comportamientos del actor cuando vivía Ingeniero Maschwitz, provincia de Buenos Aires, en su adolescencia.

Una ex vecina de Fede Bal dijo que en su casa sólo había “joda, alcohol y olor a porro”
Una ex vecina de Fede Bal dijo que en su casa sólo había “joda, alcohol y olor a porro”

Fede Bal se ha consolidado en los últimos años como una de la grandes figuras del espectáculo argentino. Actualmente disfruta de un gran presente laboral. Cada gala se luce en la pista del Súper Bailando junto a Lourdes Sánchez y en su faceta como actor está a la espera del estreno de dos películas, una de ellas filmada junto a su padre, Santiago Bal.

Esta imagen de un joven maduro y comprometido con su trabajo, contrasta con impresión que dejó en Ingeniero Maschwitz durante su adolescencia. Una ex vecina del hijo de Carmen Barbieri lo acusó de no haber dejado el mejor recuerdo y acusó algunas actitudes del artista.

En diálogo con "El show del espectáculo", ciclo radial que conduce Ulises Jaitt, Mónica Valderrama afirmó que "en todo el barrio no quedaron los mejores recuerdos de él y su padre. Sus padres se iba de gira y Fede se quedaba los fines de semana acá. Yo compartía medianera y era joda, alcohol y olor a porro. No pude seguir con el conflicto porque no podía seguir pagando abogados. Carmen tuvo que vender la casa hace un par de años cuando se separó de ese señor, de ella no puedo decir nada. Pero ellos...".


Mónica Valderrama, ex vecina de Fede Bal.
Mónica Valderrama, ex vecina de Fede Bal.

La mujer reconoció que no fue posible establecer diálogo con Federico, mientras vivió en la localidad de Provincia de Buenos Aires: "Era imposible porque entraba y por poco tenías que mirar al piso. Es una persona agrandada, irónica, cínica, maleducada", acusó.

La ex vecina de los Bal recordó que "hay una confitería que no puedo nombrar, pero la gente estaba compartiendo un café y él llegaba, se subía arriba de una mesa y cambiaba el televisor. Traía malestar. La gente cuando lo veía decía 'ahí viene el pendejo de mier...".

Valderrama explicó que estas actitudes del actor se prolongaron "durante toda su adolescencia, lo padecí cinco años. Muchos de los vecinos se fueron a vivir a otro lugar y los que quedamos somos unas cinco familias".

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