Pensar en Japón siempre es sinónimo de hacerlo en minimalismo, espacios abiertos y alturas originales; pero también es origami y formas geométricas. Este tesoro oculto es el ejemplo perfecto de esta combinación, la casa en Hokusetsu, Osaka, ha sido ideada por por Tato Architects, con Yo Shimada a la cabeza.
Las casas bien planificadas a veces no tienen en cuenta el espacio y la relación con la vida humana; si bien son cómodas, esa preparación tiene el riesgo de forzar un estilo de vida concreto en los residentes. Esta casa se salta todas las reglas predefinidas de habitar.
El estudio, desde el principio, quiso buscar una solución autónoma y heterogénea para la vivienda, en donde se permitiera a la familia vivir de una manera más activa y libre, sin condicionantes o espacios demasiado cerrados.
Estas áreas geométricas en ángulos simples son una de las formas posibles que crean el pleno uso de las habitaciones, huyendo de las líneas rectas, las paredes, y creando una conciencia del espacio expandido.
Está concebida como residencia para una familia que desea disfrutar de lo cotidiano y compartir. A la hora de llevar a cabo el diseño, se pensó disponiendo doce cuadrados conectados entre ellos con un rombo compuesto por dos triángulos regulares.
Desde el cielo, parece una pieza compleja de origami en todas sus formas. Cada una de las piezas de cubo encaja a la perfección en altura y proporción respecto a las otras, pero todas ellas en ángulos diferentes.
Las estancias principales se repartieron en las áreas cuadradas y las zonas romboidales se consideraron de uso más libre. La parcela permanece relativamente cerrada en el exterior, para proporcionar intimidad y privacidad.
Hay tres espacios de jardín a lo largo del perímetro exterior y dos patios centrales. Como resultado del diseño del patrón, tanto los espacios internos como los patios se iluminan con luz superior.
La estructura está hecha de madera, y cada planta cuadrada se apoya simplemente en pilares, lo que da como resultado un interior tranquilo a pesar de su forma única.
El diseño de esta casa tiene una simplicidad similar al plan 'una cruz dentro de un cuadrado' utilizado en la arquitectura de casas antiguas en Japón.
Cada parte, aunque representa una calidad diferente, también es compatible y expandible, y existe la posibilidad de que surjan varias maneras de circular y habitar en ella.
Está llena de espacios autónomos que pueden acomodar cambios en el estilo de vida. Es un laberinto geométrico y abierto donde los espacios se reflejan repetidamente en una figura prismática.