Tras décadas dedicadas a la experimentación de las formas geométricas al calor –y al frio- de la luz y del color en movimiento, a los 91 años, Jullio Le Parc (Palmira, Mendoza, 1928) acaba de inaugurar la obra más grande –y por cierto una de más impactantes- de su carrera: un bellísimo móvil de unos 10 metros de perímetro, y una tonelada de peso, compuesta por 2.660 piezas de acero inoxidable pulido que se encuentra en un museo del País Vasco, España.
"Kuboa" se llama la pieza que, desde el lunes pasado se encuentra en la "plaza"-el amplio patio techado de la planta baja- del Centro Internacional de Cultura Contemporánea Tabakalera.
La instalación fue diseñada antes de la pandemia por Le Parc para transformar el ingreso al lugar y acercar a los visitantes "a la figura de un artista que se caracteriza por aunar la búsqueda de la accesibilidad y el disfrute del arte para todos los públicos". Pero recién esta semana fue inaugurada oficialmente.
La página oficial de la Tabakalera ofrece un video que registra un momento fascinante: el montaje de la obra, cuando el "cubo" de metal es levantado desde uno de sus vértices hasta ganar el centro de la nave del edificio.
Así es presentado el artista palmirense por la sala vasca: "Artista revolucionario e innovador, Julio Le Parc ha contribuido con sus obras al arte cinético y óptico. Es uno de los grandes artistas geométricos y cinéticos surgido en los años sesenta, cofundador del Groupe de Recherche d'art Visuel (GRAV), un movimiento artístico que pretendía introducir el principio de incertidumbre e inestabilidad en el arte. Le Parc trabaja desde hace más de 50 años con instalaciones en las que la luz, el movimiento y la participación del público son parte fundamental de sus obras.
A finales de 2018 inauguró en el Met Breuer Julio Le Parc 1959, la exposición que supuso el primer desembarco individual del artista en Nueva York, una muestra que presentó una selección nunca antes vista de "gouaches" de uno de los años más prolíficos y transformadores en la carrera del artista. El pasado diciembre recibió la Legión de Honor del Ministerio de Cultura francés.