Un terremoto de magnitud 7.7 sacudió el Caribe entre Cuba y Jamaica el martes, sin que se reportaran daños, a pesar de las evacuaciones de edificios reportadas desde La Habana a Miami.
Autoridades estadounidenses emitieron una alerta de tsunami en las costas alrededor del epicentro del sismo, pero luego la levantaron.
El epicentro del terremoto se ubicó en el mar, al sur de Cuba y al noroeste de Jamaica, a una profundidad estimada en 10 kilómetros, según el Instituto de Geofísica de Estados Unidos (USGS), que revisó aumentando una primera estimación de magnitud 7.3.
El temblor fue perceptible en todo el territorio cubano, con mayor fuerza en las provincias de Guantánamo, Santiago de Cuba, Granma, Holguín, Las Tunas y Camagüey (todas en el este).
"Hasta el momento no se reportan daños materiales ni humanos", dijo a la televisión cubana el jefe del Servicio Sismológico Nacional, Enrique Arango, quien descartó "peligro de tsunami para Cuba", aunque advirtió sobre posibles réplicas del temblor.
El terremoto se sintió en la mayor parte de Jamaica. En La Habana, cientos de personas terminaron en las calles después de las evacuaciones de varios edificios de oficinas.
Este es el segundo terremoto que se siente en Cuba desde principios de año: el 24 de enero, la red del Servicio de Sismología registró un temblor de magnitud 4.2 en la provincia de Guantánamo (este).
El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico del gobierno de Estados Unidos emitió una alerta de tsunami para varias áreas costeras del Mar Caribe en el proceso, pero lo levantó un cuarto de hora después.
El epicentro del terremoto fue de 140 km al suroeste de la localidad cubana de Niquero. En Miami, en el sureste de los Estados Unidos, la Policía evacuó varios edificios como medida de precaución, pero no se reportaron daños de inmediato.
"No se han reportado heridos", tuiteó la Policía de la ciudad. Sin embargo, el municipio ha anunciado que ha activado los centros de comando en el distrito de Brickell y en el centro, donde se han reportado vibraciones.