El Bicentenario de la Independencia nos alcanza inmersos en profundas dificultades, desencuentros y vergüenzas imposibles de ocultar. Sin embargo, el orgullo nacional persiste -a veces herido más que nada por fracasos deportivos y penurias económicas- e igual sentimos que amamos a nuestra Patria, donde vivieron nuestros abuelos, donde crecen nuestros hijos.
¿Quién puede asegurar si este país que supimos conseguir es el que imaginaron los congresistas y los hacedores de aquella histórica declaración de Tucumán? Categóricamente, nadie tiene esa respuesta.
Pero sí podemos mirar atrás, inspirarnos en ese pasado histórico, en esos hombres y mujeres visionarios de los que nos hablan desde la escuela primaria, para imaginarnos un futuro mejor. Tal intenta ser el propósito de este suplemento de colección que Los Andes pone hoy en manos de sus lectores y de todos los mendocinos.
No se trata de un repaso cronológico de hechos, sino de reflexiones sobre aquellas ideas, acontecimientos y personajes que torcieron el curso de la Historia y sembraron las semillas de aquellas instituciones que nos arrimaron a la organización nacional.
En resumen, un documento de 64 páginas, rico en contextos, que nos ayuda a entender, con datos, argumentos y valiosas explicaciones de los estudiosos, de dónde venimos y hasta dónde somos capaces de llegar. Que lo disfruten.
Y que sirva de impulso para mirar hacia adelante, crecer y reconocernos, incluso en nuestras diferencias.
