Ante unas 600 personas que colmaron el Teatro Independencia, el sueco Jon Arvid Rosengren se consagró como el mejor sommelier del mundo al ganar la instancia final del concurso de mejor Sommelier del Mundo Argentina 2016, realizado desde el viernes y hasta ayer en nuestra ciudad.
Por su parte, la representante argentina, Paz Levinson, quedó fuera de las instancias finales. Igual, todavía falta conocer si con su clasificación a las semifinales podrá alcanzar o superar su propia marca del 11° puesto en el mundial pasado, Japón 2013.
Tras el veredicto del jurado, la primera reacción de Rosengren fue de sorpresa, aunque no dio la impresión de que fuera falsa modestia sino que en su rostro pudo verse un gesto verdaderamente genuino. Sus palabras transmitieron este sentimiento: “Fue realmente inesperado, se siente muy bien. No esperaba ser el ganador y agradezco a todos, al jurado, a los organizadores, a mi familia y a mi novia", dijo Jon Arvid, de 31 años. Se impuso en la final ante el francés David Biraud y la irlandesa Julie Dupouy (nacida en Francia y una de las favoritas del concurso).
“Agradezco al team sueco que está atrás (en los asientos del fondo del teatro) y que me apoyó constantemente”, agregó el ganador desde el escenario señalando a sus amigos, disfrazados de vikingos y con atuendos azules y amarillos, como su bandera, que lo acompañaron en todo el trayecto del concurso.
“He encontrado personas muy lindas y el ida y vuelta con la gente fue muy importante”, completó Rosengren, quien recibió como obsequio una botella de espumante elaborada por el reconocido orfebre Juan Carlos Pallarols, quien realizó -entre otros objetos- un cáliz utilizado por el Papa Francisco durante su gira por Estados Unidos.
En el currículum del sueco también figura que fue Mejor Sommelier de los países nórdicos 2009, Mejor Sommelier de Suecia 2010 y 2011, semifinalista como Mejor Sommelier del Mundo 2013 y Mejor Sommelier de Europa 2013.
La gran final
El concurso realizado en la ciudad de Mendoza es la 15° edición del certamen y la primera en realizarse en América Latina. La organización del evento estuvo a cargo de la Asociación Argentina de Sommeliers (AAS), encabezada por Andrés Rosberg, quien aseguró que la final fue impresionante y hasta se dio el lujo de tomar la primera "selfie" en una final de sommellerie.
El evento final de la prestigiosa competición fue presenciado por unos 600 espectadores en el Teatro Independencia, además de otras 400 personas que lo siguieron en pantallas gigantes instaladas en el Hotel Hyatt y miles de aficionados al vino de todo el mundo que miraron las pruebas por streaming en internet en vivo.
Además, la instancia final fue animada por el prestigioso sommelier Gerard Basset, quien llevó adelante el espectáculo mientras se desarrollaban las diferentes pruebas a las que se sometieron los concursantes. Estas sirvieron para comprobar los conocimientos y habilidades en temas relacionados al servicio, cata, vitivinicultura, gastronomía, geografía vitivinícola y procesos de elaboración, producción y consumo de los más diversos productos y bebidas del mundo.
Sobre el final, y previo al anuncio del ganador, el público disfrutó de un espectáculo de tango realizado por Mora Godoy y José Lugones, quienes fueron presentados por Rosberg como la pareja que bailó para el presidente de Estados Undos, Barack Obama. Al terminar su presentación, fueron ovacionados de pie.