El restaurante Höst está situado en el centro de Copenhague y, sin embargo, uno podría pensar que se trata de una granja. Aquí radica el encanto de este espacio. Un local moderno y urbano con referencias al mundo rural y romántico. Un pequeño universo creado a partir de contrastes y en los que la tradición y el diseño escandinavo se funden en uno solo.
El proyecto fue realizado realizado gracias a la colaboración de tres equipos: el estudio de arquitectura y diseño Norm Architects, el estudio de diseño Menu y la empresa de hostelería Cofoco.
La estética de Höst sigue un cierto paralelismo con la nueva cocina escandinava: materiales tradicionales y elementos rurales con vocación moderna buscan satisfacer el resto de sentidos.
Höst es rústico y minimalista. Rural y urbano al mismo tiempo. Contrastes que, sin embargo, crean un ambiente íntimo.
La clave es la yuxtaposición de todo y en todo. Materiales fríos y cálidos. Muebles antiguos y modernos. Objetos de diseño y tradicionales. Elementos románticos e industriales. Líneas funcionales versus objetos puramente decorativos. Un ejemplo: lámparas industriales y mantas de lana.
Minimalismo en el mobiliario o en el menaje pero también en el espacio. Aquí no hay mesas pegadas unas junto a las otras. Todo está separado. Esto otorga sensación de amplitud, de distancia, de espacio propiamente dicho, pero creando al mismo tiempo un ambiente acogedor e intimista.
La madera, por supuesto, otorga la esencia rural al lugar. En los techos, en las mesas, en la barra, y en forma de tablones siempre. Los muros y las paredes, por su parte, adquieren un toque bucólico al dejar los ladrillos a la vista y al estar pintados de blanco.
El color blanco unifica todo el espacio y aporta grandes dosis de luminosidad. Poco color para el mobiliario. Sólo marrones, negros y grises. Las plantas son las encargadas de romper la neutralidad y traer el componente más natural.
Del mobiliario destacan las ventanas de un antiguo hospital, las sillas de (por supuesto) diferentes formas y colores o elementos decorativos como un ventilador antiguo.
Para el apartado de la iluminación se ha optado por la mezcla de luminarias. Lámparas industriales, sencillos portalámparas y velas para los rincones más reservados. A mencionar también la lámpara colgante situada en el espacio de doble altura que une las dos plantas mediante la escalera.
Las lámparas colgantes de tijera negra diseñadas por Menu, hacen una declaración urbana contra el entorno más rústico. El minimalismo y la simplicidad tan presentes en Höst dan la impresión que esto no es un lugar comercial en absoluto, sino la cocina del país de alguien en la Dinamarca rural.
Suspendido por encima de las escaleras cuelgan una colección de pequeñas luces de colgante que forman una araña en espiral.
Una colección compuesta por una gran variedad de piezas, colores y materiales que proporcionan múltiples combinaciones y expresiones.
Las grandes paletas de madera forman el bar, donde se alinean simples taburetes de bar negro. Las elegantes pizarras y cerámicas utilizadas en el restaurante, complementan la estética perfectamente