Fue uno de los equipos que mejor fútbol jugó hasta que se cruzó con Chile y lo eliminó en semis. Anoche quería, al menos, retirarse con un par de premios: el tercer puesto y los dólares por ese escalón del podio.
La Selección de Colombia, con José Pekerman como DT, derrotó a Estados Unidos y cerró una gran performance con un merecido triunfo.
Los primeros minutos fueron de puro estudio. James Rodríguez no encontró espacios para desequilibrar con su talento, mientras el equipo de Klinsmann proponía poco. Entonces el juego se hacía aburrido aunque, pasado ese lapso, el anfitrión se animó e inquietó en un par de oportunidades a Ospina.
Pero quien sacudió la modorra fue el team cafetero, mediante una certera intervención de Bacca. Así se fueron unos 45’ iniciales en los que solamente un golazo podía romper la paridad, como resultó ser. Cucharita de James para Arias, quien cabeceó y el balón le quedó al goleador del Milan que no falló.
El ST arrancó con la misma dinámica con la cual finalizó la primera etapa. Avisó Colombia con un desborde de Arias y al ratito tuvo el empate Dempsey, con un tiro libre que llevaba destino de red y que Ospina sacó al córner. Como respuesta llegó un zurdazo cruzado de James Rodríguez que se fue apenas.
El partido no estaba definido y los dos iban con mucha gente. El mediocampo era una zona de tránsito por lo que se jugaba cerca de las dos áreas. Así las cosas, faltaba el toque final y pudo ser con un chiche de Cuadrado.
La picó ante dos defensores, el balón se estrelló en la únión de palo-travesaño, encontrando a Howard en su regreso.
El juego no daba respiro. Wood respondió con un remate débil pero preciso que también dio en el palo.
Pero no hubo caso. A pesar de que los dos equipos tuvieron sus chances para agregar otra cifra al marcador, ambos fallaron en la definición y así se despidieron de la Copa América Centenario, con triunfo merecido para Colombia que, además, se hizo acreedora de un suculento premio: tres millones de dólares.