Suiza no sólo es conocida por ser considerada como un paraíso fiscal sino también por su tradicional neutralidad, por contar con cuatro idiomas oficiales, sus relojes y la gran variedad y calidad de sus chocolates. Identificada también como Confederación Suiza, es un país sin salida al mar ubicado en Europa central que limita al norte con Alemania, al oeste con Francia, al sur con Italia y al este con Austria y Liechtenstein.
Con una población de más de 8 millones de habitantes, Suiza es una república federal de 26 estados, llamados cantones, siendo Berna la sede de las autoridades federales, mientras que los centros financieros del país se encuentran en Zurich, Basilea, Ginebra y Lugano.
La forma de gobierno es de democracia directa y los ciudadanos cuentan con los denominados derechos civiles, que entre otras cosas le permiten elaborar una “iniciativa constitucional” y a un “referéndum”, los cuales pueden influir en las decisiones del parlamento.
El régimen tributario, especialmente favorable a los ciudadanos y empresas no residentes, es uno de los factores que permiten que Suiza sea uno de los países más ricos del mundo con un Producto Bruto Interno per cápita que asciende a 78.754 dólares y la ubican entre las cuatro economías del mundo.
Suiza evitó históricamente todas las alianzas que puedan implicar acción militar, política o económica y, justamente, no forma parte de la Unión Europea, ya que su población rechazó la membresía desde principios de la década de 1990, aunque desde 2005 forma parte del espacio de Schengen, por lo que eliminó los controles fronterizos con las naciones del bloque. Incluso, recién en 2002, el país helvético se sumó como miembro pleno a la ONU, pese a que fue el primer estado en adherirse a la organización después de un referéndum.
En lo que tiene que ver con su política internacional, Suiza mantiene relaciones diplomáticas con casi todas las naciones e históricamente intervino como mediador de otros países. Además, importantes instituciones internacionales tienen sede en ese país europeo entre los que se destacan la Cruz Roja, la ONU, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En lo deportivo, en tierras de Roger Federer y Martina Hingis, dos de las máximas estrellas del tenis mundial, se instalaron las sedes del Comité Olímpico Internacional (COI), la Unión Europea de Asociaciones de Fútbol (UEFA) y la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), cuyo titular es el suizo Joseph Blatter.
Suiza tiene un alto nivel de alfabetización, casi del ciento por ciento, y culturalmente fue influenciada por las grandes potencias de Europa y es, por eso, que existen cuatro idiomas oficiales, aunque más del 60 % de la población habla alemán.
Más allá de todos estos datos, Suiza es reconocida por su chocolate que comenzó a fabricarlo desde el siglo XVIII aunque trascendió con la invención del chocolate con leche en 1875.
Así juega su equipo
Entre algunas buenas cualidades, el seleccionado suizo es un equipo ordenado, con variantes por los costados y, sobre todo, con un jugador como Xherdan Shaqiri, capaz de romper líneas y esquemas defensivos.
Es justamente el futbolista del Bayern Munich alemán el arma principal de ataque del equipo suizo y en él están depositadas buena parte de las esperanzas del conjunto europeo.
El experimentado DT alemán Ottmar Hitzfield cuenta con dos laterales como Stephan Lichtsteiner y Ricardo Rodríguez, cuyas características principales son en ofensiva, y son sus recurrentes escaladas las que le permiten a Shaqiri contar con las mejores opciones de pase.
Además, tienen en Gokhan Inler y Valon Behrami una pareja de centrales que recupera y distribuye, y de su orden depende buena parte de las posibilidades del equipo. Shaqiri se moverá por delante de ellos y con la intención de jugar a espaldas de Mascherano y Gago, para quedar de frente al arco y con posibilidades de encarar a la defensa argentina.
El punto más débil de Suiza está en la defensa, donde suelen dar ventajas debido a desconcentraciones o malos retrocesos de los mediocampistas. Muchas veces, Inler y Behrami se adelantan en el campo y a sus espaldas los volantes ofensivos y delanteros rivales cuentan con espacios para poner en aprietos a la defensa.
Negocios con Argentina
El comercio bilateral entre Argentina y Suiza durante 2013 dejó un saldo favorable para nuestro país de 130 millones de dólares, siendo el oro el principal producto que compra el país europeo. Las exportaciones totales de Argentina a Suiza treparon a 642 millones de dólares en el año pasado, lo que implica una caída de 2,4 por ciento frente al de 2012.
El principal producto vendido fue el oro para uso monetario, que reportó 456 millones de dólares, equivalente al 71% de las exportaciones. En tanto, las importaciones llegaron a 512 millones de dólares, lo que muestra una baja de 7,3 %.
Las compras argentinas en Suiza se concentran en medicamentos y productos inmunológicos, alcanzando a casi el 33 % del total.
Suiza se encuentra en el puesto 40 entre los destinos de las exportaciones de nuestro país y en el 74 en el listado que nomina al origen de las importaciones.
Un poco de historia
La Confederación Suiza, o Helvética, fue fundada en 1291, como una alianza defensiva de cantones, e hizo de su neutralidad y su sistema financiero dos de sus más destacadas cartas de presentación frente al resto del mundo. Por su superficie, Suiza está ubicada en el 135 puesto entre todos los países del planeta tierra, pero por su economía está entre los veinte primeros, en tanto disputa el quinto puesto según su PBI per capita.
Los datos principales del rival que buscará sortear la Argentina para lllegar a los cuartos de final de la Copa del Mundo son los siguientes:
Superficie: 41.277 kilómetros cuadrados.
Países limítrofes: Austria, Francia, Italia, Liechtenstein y Alemania.
Etnias: alemanes 65%, franceses 18%, italianos 10%, otros 7%.
Idiomas oficiales: alemán, francés, italiano y romanche. Otras lenguas: serbo-croata, albanés, portugués, español e inglés.
Religión: Católicos 38,2%, protestantes 26,9%, musulmanes 4,9%, otras religiones cristianas 5,7%, ninguna 21,4 por ciento.
Población: 8 millones de habitantes.
Población urbana: 73,7 por ciento.
Capital: Berna (350 mil habitantes)
Ciudades principales: Zurich (1,2 millón), Ginebra (190 mil) Basilea (170 mil) y Lugano (56 mil habitantes).
División administrativa: 26 cantones.
Esperanza de vida al nacer: 82,39 años.
Día nacional: 1 de agosto.
Presidente: Didier Burkhalter.
PBI: 646.200 millones de dólares (CIA Year Factbook), 622.855 millones (FMI), 527.920 millones (Banco Mundial).
Productos industriales: Maquinaria, química, relojería, textiles, instrumentos de precisión.
Servicios: turismo, bancos, seguros.
Inflación: -0,4 por ciento (2013).
Exportaciones: 229.200 millones de dólares.
Importaciones: 200.500 millones de dólares.
Reservas internacionales: 536.300 millones de dólares.
Deuda externa: 1,5 billón de dólares.
Moneda: franco suizo (0,95 por dólar).