Espectáculos
En el stream de Telefe liquidaron a Milei con Susana: “Embole y papelón”
hace 52 minutos
Una feroz pelea entre tres policías, que terminó a los tiros esta tarde en Guaymallén, ocasionó la muerte de una mujer y de un niño de 8 años.
El confuso y sangriento hecho ocurrió minutos después de las 16 en la casa 32, ubicada en la manzana "H" del barrio Solares de San Antonio. Aunque los investigadores aún intentan determinar cómo se dieron los hechos en un escenario complejo, fuentes policiales confirmaron que tres efectivos de la fuerza participaron del hecho.
Por motivos que se tratan de esclarecer, se produjo una riña entre los auxiliares José Ontiveros, María Gabriela Fernández y un tercero de apellido Condorí, de acuerdo al relato oficial.
Según trascendió, Ontiveros y Fernández serían pareja y fue una disputa familiar lo que, al parecer, desencadenó las violentas reacciones.
Las cosas pasaron a mayores cuando con sus armas reglamentarias los policías comenzaron a dispararse.
En el hecho resultó herido un niño de 8 años, quien murió al llegar al hospital pediátrico Humberto Notti. El menor sería hijo de Gabriela Fernández, aunque otra versión indica que se trata de un sobrino de la mujer.
Según indicó en un parte el ministerio de Seguridad, la abuela del menor -identificada como Gabriela Beatriz Fernández- también murió pero donde se produjo el conflicto, cuando era asistida por paramédicos del Servicio de Emergencias Coordinado.
Misterio y silencio
Al lugar llegó la cúpula del ministerio de Seguridad, con el ministro Leonardo Comperatore a la cabeza. El funcionario estuvo escoltado por el jefe de Policía, Juan Carlos Caleri, y parte de su gabinete. Todos se mostraron conmovidos por lo ocurrido.
El caso pasó de inmediato a manos del fiscal de Delitos Especiales, Daniel Carnielo. Ante lo complejo del hecho, las autoridades prefirieron no dar demasiados detalles mientras se tejen líneas investigativas. A eso se suma un estricto secreto de sumario que no permite conocer en detalle ni siquiera los nombres y la relación de los involucrados.
El entramado es complejo. Es que mientras Seguridad primero sustuvo que la víctima fatal sería una mujer policía, luego indicó que la madre de esta uniformada fue quien fue alcanzada por los plomos oficiales. Fernández y su madre vivían en esa casa con el pequeño. “Presumiblemente el agresor haya sido el ex esposo de la hija de la víctima, que es auxiliar”, esgrimió un pesquisa en el lugar.
Así las cosas, las declaraciones de testigos sobre lo ocurrido y las pistas que pueda levantar el personal de Policía Científica que llegó al lugar tratarán de dilucidar qué fue lo que ocurrió exactamente.
