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hace 5 horas
La Policía de Francia detuvo a un joven de 19 años que asesinó a un sacerdote que presuntamente había abusado de él. El muchacho identificado como Alexander V. estaba en la casa de Roger Matassoli, de 91 años, en Agnetz, una población al norte de Francia, cuando decidió clavarle un crucifijo en la garganta, provocándole la muerte por asfixia, según informó La Vanguardia.
El cura contaba con al menos cuatro acusaciones de abuso sexual contra niños, entre los que se encontraba el chico de 19 años y su padre, entre 1960 y 2000. Pese a las sospechas de pedofiia, el religioso no fue excluído de la nómina de la Iglesia sino hasta 2018, conforme a lo publicado por Daily Mail.
Matassoli había sido trasladado tres veces de diócesis, de Clermont a Saint Andre Farivillers y de allí a Agnetz. Conforme a lo expresado a medios franceses por el obispo Jacques Benoit-Gonnin, el clérigo había sido aparta de sus tareas en la Iglesia en 2009, pero no fue hasta diez años más tarde y por la declaración de dos de sus víctimas que lo desplazaron de su cargo.
El presunto asesino fue arrestado y acusado de tortura, asesinato y resistencia contra la autoridad durante su detención.
Todo sucedió el pasado 4 de noviembre cuando la policia encontró el cuerpo con signos de tortura de Matassoli. El principal sospechoso del crimen trabajaba en la casa del sacerdote ayudándole con las tareas de limpieza y fue detenido el mismo día mientras intentaba huir con el coche del fallecido.
La Policía está investigando el caso basándose en la hipótesis de que el asesinato fue "un acto de venganza". En tanto Alexander ha declarado ante las autoridades que no recuerda cómo transcurrieron los hechos del 4 de noviembre.
