La denuncia por redes sociales de un joven gay que no pudo donar sangre por pertenecer a un grupo con "alta prevalencia de transmisión de VIH" sacó a la luz que, un peso de una resolución de 2015, la discusión sobre cómo lograr un equilibrio entre un cuestionario eficiente para obtener sangre segura y no caer en la discriminación, no está saldada.
"El viernes 27 de diciembre fui al Hospital Garrahan con la voluntad de donar sangre pero me encontré con la triste realidad de que hoy, a horas de meter un pie en 2020, un hombre homosexual no puede donar porque es considerado factor de riesgo", escribió Fernando Suárez, de 21 años, en su cuenta de Instagram.
"Por motivos que no vienen al caso -continúa el posteo- sé perfectamente que soy una persona apta para donar, aún así, en la entrevista me descartaron completamente la oportunidad de hacerlo: porque si sos hombre y tuviste relaciones sexuales en los últimos 12 meses con otro macho, no podes donar ".
"Deberían hacer hincapié en conductas de riesgo porque cualquier persona, hombre o mujer, puede tener una enfermedad de transmisión sexual. Lamento haber pasado por ese momento incómodo y triste, y todavía sigan existiendo instituciones que nos excluyan violentamente", dijo Suárez.
Hasta 2015, la resolución 865/2006 de la ley Nacional de Sangre (Nº 22.990) contenía un cuestionario que permitía excluir, entre otras variables, a los que hubiesen tenido relaciones homosexuales. En 2015 se modificó esa resolución y se quitaron del cuestionario las preguntas referidas a la orientación sexual. Pero, a la vez, una nota en el artículo 2 advierte que "dada la complejidad del proceso de calificación de los anticuerpos de sangre de bajo riesgo es necesario tener en los datos epidemiológicos y la evidencia científica disponible, en el país y / o la jurisdicción ".
Sobre este punto, Silvina Kuperman, titular del Servicio Centro Regional de Hemoterapia del Garrahan, especificó que se basan en el criterio del "Boletín de Sida de 2019 que advierte que mientras en toda la población la prevalencia de VIH es de 0,4%, su distribución en poblaciones más vulnerables es la siguiente: trabajadores / as sexuales y / o en situación de prostitución: 2 a 5 por ciento; contexto de encierro: 2,7; usuarios de drogas inyectables: 4 a 7; hombres que tienen sexo con hombres: 12 a 15% y mujeres transexuales: 34% ".
"La nuestra no es una visión arbitraria ni basada en prejuicios -señaló-. Seleccionamos los protocolos específicos en datos epidemiológicos locales y desafortunadamente la evidencia científica actualmente disponible es inadecuada".