Un hombre fue asesinado durante un asalto en la ruta

La víctima tenía 64 años y volvía junto a su familia de una reunión en Rodeo de Medio. Pero un desperfecto mecánico lo dejó a merced de dos delincuentes, que le dispararon y huyeron.

Un hombre fue asesinado durante un asalto en la ruta

Ocurrió en las primeras horas de ayer, cuando una familia regresaba de una fiesta de la zona Este, hacia el departamento de Las Heras, donde residen.

El grupo a bordo de un Ford Falcon (patente TAC 200), debió detener la marcha ante un desperfecto mecánico que lo dejó parado a un costado de la ruta 7.

Ante la emergencia mecánica  el hombre identificado como Camilo Eduardo Andrada, de 64 años, llamó a Fernando, uno de sus hijos para que lo auxiliara.

Y así fue que llegó el joven en un Fiat 128. Pero también en ese momento el grupo fue sorprendido por dos sujetos armados con la clara intención de apoderarse de las pertenencias del grupo.

Junto al conductor viajaban en el Falcon su esposa Marta Luna (64) y sus hijos Diego (27) y Camila (19), que no fueron mudos testigos del atraco sino que, a los gritos, intentaron evitar el robo; lo que provocó la lógica reacción del hombre que terminó forcejeando con uno de ladrones y recibió un disparo en un costado del cuerpo.

Ante la emergencia, el herido fue llevado hasta el hospital Central, donde se le diagnosticó herida de arma de fuego en zona abdominal con orificio de entrada sin salida, lesión que, según el parte, provocó su fallecimiento a poco de ingresar al quirófano.

El caso, originalmente y por jurisdicción, quedó en manos de la Oficina Fiscal N° 16 de Rodeo del Medio, pero horas después, y a pedido de la fiscal de homicidio, Claudia Ríos, el expediente le fue remitido.

Y si bien la fiscal por estas horas es subrogada por su par, Gustavo Pirrello, retornará a su turno este lunes, ayer le aseguró a Los Andes, que el hecho, calificado como homicidio criminis causa, por el momento y teniendo en cuenta que ocurrió en medio de la ruta, no tiene detenidos.

Testigos de la muerte

La familia Andrada volvía de una reunión familiar en un domicilio de calle Las Margaritas, de Rodeo del Medio.

"Fue una cena nada más...", explicó a Los Andes, Diego, junto a Fernando, en la puerta de la casa en el barrio Colombia de Las Heras.

Diego trató, junto a su padre, arrancar el Falcon, pero ante la imposibilidad optaron por llamar a Fernando para que los auxiliara. La llegada del mayor de los hijos de Camilo fue casi coincidente con la aparición de los ladrones.

"Uno de ellos tenía el arma, con la cara semi tapada", recuerda uno de los hijos de la víctima. Y agrega: "Fue todo muy rápido. Mi padre se agarró con uno de ellos, y ahí escuché un disparo. Los dos cayeron al piso, pero también se levantaron. El ladrón a la carrera, mientras que mi padre dio algunos pasos y cayó...".

El recuerdo de la escena y los momentos vividos en la madrugada, un par de horas antes de que el cuerpo fuera entregado desde el Cuerpo Médico Forense,  se hace por momentos difuso.

El hijo de la víctima rescata que "agarré una piedra para tirarle, pero me dispararon cuatro veces a los pies y salieron corriendo".

Finalmente el hombre cargó a su padre (operado del corazón hace unos 4 meses) en el 128 y lo llevó hasta el Central, donde llegó sin signos vitales, según los médicos.

Otro caso similar

También ayer, a la 1.30 y en el departamento de  Junín, se denunció otro hecho de características similares, pero con un final distinto.

Un joven de 20 años, identificado como Marcos Juan Guayamas, a cargo del delivery de una pizzería, sufrió el corte de la cadena en su motocicleta, cuando transitaba por las calles Avendaño y Belgrano, de ese departamento del este mendocino.

Y mientras trataba de reparar el desperfecto fue atacado por dos delincuentes armados que le robaron la recaudación que, en ese momento, alcanzaba a la suma de 4 mil pesos, escapando en una moto color negra, según lo denunciado por la víctima, en su presentación ante las autoridades de la Comisaría 19° de aquel departamento.

Dos hechos cometidos en 30 días

Dos hechos de característica similares se registran en las crónicas policiales de los últimos 30 días.

Hace poco más de un mes (13 de noviembre) un joven fue asesinado en un intento de asalto en plena ruta. Cristian Emanuel Reyes tenía 29 años y perdió la vida al ser baleado por delincuentes que intentaron asaltarlo a él y a otros dos hombres con los que circulaba en una camioneta por la ruta 40, cerca de la localidad de Luján de Cuyo.

Reyes conducía una camioneta Ford F 100, en la que circulaba junto a dos hombres de 47 y 53 años, por la ruta 40, en la zona de Agrelo, cuando el grupo fue interceptado por cuatro desconocidos armados, con claros fines de robo.

Ante la resistencia al asalto, uno de los delincuentes realizó un disparo que entró en la ventanilla izquierda de la camioneta y el proyectil dio en la axila del conductor.

Mientras que el pasado 26 de noviembre, Hugo Caguasiri (38) recibió un disparo en la espalda, tras ser sorprendido por dos sujetos que le robaron la camioneta Ford F 100.

La víctima se desplazaba junto a su hermano Juan (50 años), por la ruta 16 y callejón Bertona, en la localidad de El Carrizal, en Luján de Cuyo, cuando fue interceptado por dos individuos que se movilizaban en una moto color rojo.

Los hicieron detener y a punta de pistola, le sustrajeron el vehículo, según el relato del hermano de la víctima fatal.

En dos robos se llevan 13 mil pesos y un auto

Los hechos fueron denunciados en Guaymallén. El primero (a las 21.30) fue en el local Go Bar, de calle Dorrego al 1900, donde dos delincuentes sorprendieron a Rodolfo Calderón (29) y Daniel García (28), propietario y empleado del comercio dedicado a la venta de vinos y bebidas, los que amenazados con armas, tuvieron que entregar la recaudación que alcanzaba a la suma de 9 mil pesos, además se llevaron dos celulares y una VW Fox que estaba estacionado en la puerta.

Mientras que 15 minutos después, el propietario de un mercadito de calle Húsares al 2000, fue asaltado por dos sujetos armados, que además de propinarle un “cachazo” en la cabeza lograron sacarle 10 mil pesos de la caja, pero antes de escapar, dispararon  sin herirlo, aunque la víctima debió ser asistido por una ambulancia SEC.

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