Paso en falso. Así se podría definir la actuación de Rivadavia ante Petrolero Argentino, equipo que le robó un triunfo en calidad de visitante. Todo lo contrario a lo que sucedió el último viernes. El Naranja fue un equipo desconocido y cayó por un doble: 68-66.
Primer cuarto: Partido muy defensivo, casi de ajedrez en el inicio. Mejor la visita aprovechando algunos errores de Rivadavia en el traslado de la pelota, más la poca eficacia en la línea de libres, así el Matador Neuquino se quedaría con el primer chico por cinco puntos de diferencia (15-20).
Segundo cuarto: Las variantes le sentaron mejor al quinteto de Minelli en el inicio del segundo período. Lazcano, Álvarez y Llaver, le dieron otro ritmo a la ofensiva Naranja.
Sin embargo en la visita, Merchant y Lavezzari fueron importantes en defensa. Antes del descanso, Vietta realizó una volcada fenomenal para estirar la ventaja parcial de Petrolero (27-34).
Tercer cuarto: La defensa visitante, marcando al límite, borró a todos los tiradores de Rivadavia. Sin comodidad para Jones, Mosconi y Álvarez, el goleo Naranja desapareció y Petrolero siguió estirando la brecha, con Millender y Cantarutti a la cabeza, siendo dos pesadillas para la defensa local n dicho período (40-53).
Último cuarto: El Naranja estaba para el knock out. Pero 5 puntos de Jones y 5 de Trejo le dieron vida, hasta lograr la igualdad faltando 1'45''. Cuando la pelota pesaba mucho y la cancha era una caldera, Franco Vieta marcó un triple fundamental que cambió todos los planes de los esteños. Sobre la chicharra un triple de Jones achicó a dos la derrota, pero no hubo tiempo para intentar algo más.
Súper Liga: Hoy, desde las 21.30, Rivadavia (0) recibirá a Anzorena (1) en el juego revancha de las semifinales.