Un freno a la ilusión

Polonia se quedó con el punto de dobles y Argentina tendrá que esperar hasta hoy para definir su clasificación a los cuartos de final de la Copa Davis. Italia será el rival del ganador.

Un freno a la ilusión

El equipo de Copa Davis de Argentina continúa al frente en la serie con Polonia, ahora por 2-1, tras haber perdido el dobles, punto en el que Carlos Berlocq y Renzo Olivo cayeron ante Marcin Matkowski y Lukasz Kubot en sets corridos, pero conserva dos chances para avanzar a cuartos de final en Gdansk, con los singles de hoy.

Berlocq, 141 del ranking mundial, y el debutante Olivo (167), fueron claramente superados por los especialistas Matkowski (15) y Kubot (28) por 6-3, 6-4 y 6-4 en dos horas y cuatro minutos de juego, ante unas 4.000 personas que ocuparon un tercio de la capacidad del estadio Ergo Arena, unos 30 de ellos, argentinos.

Como se esperaba, la dupla polaca, de las mejores del mundo, impuso su categoría ante una pareja argentina integrada por dos singlistas: uno, debutante como el rosarino; otro, con una inactividad de 105 días, desde que perdió con el uruguayo Pablo Cuevas en el Challenger de Montevideo, el 21 de noviembre pasado.

Pella, finalista hace 15 días en el ATP 500 de Río de Janeiro, puso en ventaja el viernes a la Argentina con su triunfo sobre Przysiezny por 6-1, 6-4 y 7-6 (7-5), y luego aumentó el "Yacaré" Mayer con una victoria ante Hurkacz por 6-2, 7-6 y 6-2.

En el dobles, Polonia fue superior y le bastó con un quiebre en cada set para seguir con vida en la serie, para satisfacción de sus hinchas que se hicieron oír más que ayer por sobre los argentinos que, lógicamente, fueron amplia minoría.

Polonia se plantó con Kubot en el fondo y Matkowski resolviendo adelante, con una sincronización excelente que le bastó para llevarse el set inicial por 6-3 merced a un quiebre sobre el segundo saque de Olivo en el 4-2 que llegó luego de una volea fallada por Berlocq en la red.

En el segundo parcial, Argentina se prendió y tuvo sus oportunidades, con Berlocq del lado del revés y Olivo resolviendo en la red, pero con un rendimiento de mayor a menor, sobre todo en la definición del parcial cuando cedió otra vez su servicio (2-3) y falló pelotas que parecían sencillas.

El quiebre de los polacos llegó en una jugada similar a la del set anterior, luego de un flojo segundo saque del rosarino, una devolución que encontró una mala volea de Berlocq en la red y aprovechó Kubot para tirarle un pelotazo al cuerpo imposible de esquivar.

Con dos sets de ventaja, los polacos mantuvieron la concentración y se pusieron 1-0 en el tercero con un quiebre sobre el servicio de Berlocq, el más flojo de los argentinos, aunque también el que gritaba los puntos con mayor énfasis e intercambiaba gestos con el público 'albiceleste' que apoyaba sus corajeadas.

El público argentino observaba de reojo cada festejo ajeno, mientras se entretenía en cada cambio de lado, bailando todos juntos al ritmo de Highway to hell, el temazo de AC/DC que musicalizó la segunda jornada de la serie en la portuaria ciudad de Gdansk.

Matkowski, con 16 títulos de la ATP como doblista, incluidos dos Masters 1000 de Madrid, en 2008 y 2012, y Kubot con otros 13, el más importante el abierto de Australia en 2014, no vacilaron y les bastó con mantener sus servicios para llevarse la victoria final tras ganar también el tercer set y cerrar 6-3, 6-4 y 6-4.

Argentina tendrá revancha hoy desde las 8 con el "Yacaré" Mayer en busca de su undécimo éxito en fila en la Davis (ocho de ellos como singlista) ante el local Przysiezny, ingresado al equipo para remplazar a Jerzy Janowicz, lesionado en la rodilla derecha.

Si bien la Davis históricamente ofreció sorpresas y transformó en héroes por un día a tenistas más bien discretos, es altamente improbable que Mayer pierda con Przysiezny, por el gran nivel del correntino y la diferencia de jerarquía de su rival.

Argentina debería cerrar su paso por la portuaria Gdansk con éxito y comenzar a pensar en los cuartos de final, instancia en la que le tocará Italia, en condición de visitante.

El capitán polaco juega al misterio

Radoslaw Szymanik, el misterioso capitán de Polonia que durante toda la semana ocultó en vano la lesión que padecía Jerzy Janowicz, que finalmente lo marginó de la serie, mantuvo su tesitura pero es casi un hecho que Lukasz Kubot remplazará a Michal Przysiezny hoy ante Leonardo Mayer.

"Considero que Polonia aún tiene posibilidades de ganar la serie y pondré al mejor disponible ante Mayer, un tenista muy fuerte", expresó Szymanik, de 40 años, en la rueda de prensa que ofreció en una de las salas del imponente estadio Ergo Arena, ubicado en la zona periférica de Gdansk.

Si bien Szymanik prefirió ocultar sus cartas, al igual que había hecho durante la semana cuando aseguraba que Janowicz se entrenaba por su cuenta en la ciudad de Lodz y que arribaría a Gdansk para jugar la serie (algo que finalmente no sucedió, según informó a Télam una fuente de su equipo), cambiará al rival de 'Leo' Mayer.

En ese contexto, el correntino debería jugar ante Przysiezny, quien perdió el primer punto de la serie con Guido Pella, pero su rival será Kubot, quien prácticamente no tuvo demasiado desgaste en el dobles que, junto a Marcin Matkowski, le ganó a los argentinos Carlos Berlocq y Renzo Olivo.

Si bien Kubot a los 33 años únicamente se desempeña en el circuito de dobles, jugó en singles y llegó a ocupar el puesto 41 en abril de 2010, y aún mantiene su poderoso saque, con lo que espera incomodar más a Mayer de lo que puede hacerlo Przysiezny.

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