Omar De Felippe no seguirá en Independiente. El DT le comunicó la decisión a su grupo íntimo en Cardales, donde el plantel realiza su pretemporada, cansado por la falta de refuerzos. Las declaraciones de Hugo Moyano, quien echó sobre el DT la responsabilidad de la extensión de su vínculo, habrían sido determinantes, aunque se sabe que el director técnico estaba intranquilo porque la dirigencia no cumplía sus expectativas en materia de refuerzos.
De Felippe ya había llegado a un acuerdo por los números de su nuevo contrato por un año más, al que le iban a agregar seis meses para completar una temporada y media. El propio representante del DT, Sergio Greco, admitió en su momento que “el arreglo económico estaba solucionado”. Pero la preocupación del entrenador por el armado del plantel demoraba la firma del acuerdo. La flamante dirigencia, con Moyano como presidente, puso la pelota contra el piso. Avisó que se encontró con un club devastado y que no hay dinero para la llegada de nuevos jugadores.
En la noche del martes, Héctor Maldonado y Jorge Damiani se habían acercado a Cardales pero el DT les manifestó su deseo de hablar con Moyano. Sin embargo, en la mañana de ayer, el dirigente sindical se mostró inflexible cuando habló en radio La Red. “Depende de él”, dijo el líder de Camioneros, quien destacó que en su conducción “debemos enfocarnos en lo económico”.
Al margen de las declaraciones del flamante presidente y de la situación de los refuerzos, a De Felippe tampoco le gustó que la renovación de Daniel Montenegro se dilatara tanto (por estas horas se definiría), al igual que el arreglo del contrato de Federico Insúa.
Aunque para el mediodía la renuncia no era oficial y la dirigencia se reunió con el DT, en el club de Avellaneda empezaron a pensar en su reemplazante. Se nombró a Milito como principal alternativa, en tanto que Burruchaga y Pizzi aparecen como posibles en caso de que el Mariscal diga no.
Más allá de todo esto, De Felippe es un hombre de palabra y nunca da el brazo a torcer. Ya tomó una decisión y difícilmente la cambiará, sobre todo porque la nueva comisión directiva le informó que no hará locuras en la concreción de refuerzos, lo que va contra la idea del DT de pelear el título.
El sueño deberá esperar
Luego de 322 días, De Felippe se despidió de Independiente y no cumplirá ese gran sueño que varias veces manifestó de dirigir al Rojo en Primera División.
El ex DT de Olimpo y Quilmes resistió muchos momentos endebles de su ciclo y consiguió el gran objetivo de coronar el Operativo Retorno, luego del histórico descenso que sufrió el Rojo en sus 109 años de historia.
Los puntos salientes de su era. Miguel Angel Brindisi dio la cara tras la campaña del descenso y se dirigió al equipo en la B Nacional, pero duró cuatro fechas. Tras dos empates y dos derrotas, llegó De Felippe. Con Omar, el triunfo llegó ante Huracán y se cortaron 12 partidos sin éxitos (entre Primera y BN). El equipo se fue acomodando y no perdió en 18 de los siguientes 19 encuentros.
En diciembre, un triunfo ante Patronato puso al Rojo entre los primeros tres lugares de la tabla. Pese a la expectativa inicial de una buena campaña para volver, la reacción se hizo esperar e Independiente recién se ubicó en el podio a fin de año. Pero tras bajar el nivel aparecieron los malos resultados. Peleó el tercer puesto con Instituto, Huracán, At. Tucumán y Crucero del Norte.
El 3-1 ante Crucero le puso fin al mandato de Javier Cantero como presidente. Prefirió dar un paso costado ante los malos resultados y para descomprimir ante la presión de los socios. Luego de ello, el sprint final fue clave. Es más, alcanzó un cierre con tres triunfos al hilo (Douglas Haig, Defensa y Justicia, Instituto) y un empate (Patronato), aunque la igualdad lo llevó al desempate con el Globo, para estirar el desenlace con final feliz.
