Objetivo principal del año: salvar la categoría para mantenerse en el fútbol grande. Sí. Misión cumplida.
El año comenzó complicado para el Expreso, teniendo en cuenta que tenía la soga al cuello con respecto al descenso.
Debía hacer una gran campaña para seguir en primera y lo cumplió. De la mano de Jorge Almirón, el equipo se fue acomodando y recién pudo festejar en la fecha 19 del Torneo Final, venciendo a Racing en el Malvinas Argentinas.
Fue el gran desahogo en el primer semestre de la temporada. La historia estaba muy difícil y muchos lo daban por muerto, menos para ese grupo de jugadores que lograron lo que parecía imposible.
No hay dudas que resultó una gran jugada la presencia de Almirón en el banco de suplentes, y quedó claro que no se equivocaron en la elección porque el Tomba impuso un estilo futbolístico y consiguió lo que se había propuesto.
El mundo futbolero argentino habló de cómo jugaba el Godoy Cruz del Negro.
Claro que con el tiempo las cosas empezaron a cambiar. Y bastante.
Barajar y dar de nuevo... Sabiendo que se venía un campeonato de transición, sin descenso, la dirigencia eligió un camino donde privó la austeridad. Tanto en cantidad de jugadores como en apellidos rutilantes.
Se vendieron varios futbolistas, se fueron otros tantos y se desmanteló por completo un plantel que estaba para más.
Encima Almirón pegó el portazo para irse a Independiente de Avellaneda y dejó un hueco importante de llenar.
La mirada se puso en Carlos Mayor, un hombre con experiencia sólo en el ascenso y que llegó para comandar un conjunto con escasa jerarquía.
La apuesta resultó negativa en varios sentidos, porque el entrenador nunca puso marcar su idea y los resultados no acompañaron. No hizo pie en el certamen y se quedó rápidamente afuera de las Copas (Argentina y Sudamericana) que tenía por delante.
¿Conclusión? El DT dijo adiós en la jornada 14 con más pena que gloria.
Y cuando pasan estas cosas en la Bodega, siempre aparece el “bombero” que soluciona todos los problemas: Daniel Oldrá.
El Gato se hizo cargo y buscó finalizar el campeonato lo mejor posible, pero se quedó con escasos 21 puntos.
Oldrá representa un símbolo intocable en Godoy Cruz, por eso la dirigencia cree que es el momento ideal para que siga sentado en el banco de suplentes.
El adiestrador tendrá un gran desafío para el 2015, y es darle al Bodeguero el salto de calidad que todos sueñan.
El capitán Fernández deja la Bodega
El pase de José Luis Fernández a Rosario Central ya está acordado y sólo resta que el volante firme su contrato con el Canalla. El capitán tombino será otra de las bajas que sufrirá el equipo.
La buena noticia para Oldrá es que los dirigentes tienen asegurada la continuidad de Jaime Ayoví, aunque resta ponerle la rúbrica a los papeles. La Yoya tiene todo listo para sumarse al elenco en la pretemporada.
Con respecto a los refuerzos que pueden arribar al Expreso, siguen negociando con el ecuatoriano Koob Hurtado y no se descarta alguna chance de que pueda regresar Nicolás Sánchez, pero es muy difícil que el defensor central deje la Academia.