Arda Turan, ex jugador del Barcelona y del Atlético Madrid, fue condenado por disparar una pistola y causar pánico, además de posesión ilegal de armas y causar de forma intencional lesiones durante un incidente en un club nocturno de Turquía.
El tribunal que estudió las acusaciones contra el futbolista, actualmente cedido en el Basaksehir de su país, lo condenó por estos cargos a dos años y ocho meses, pero dejó en suspenso esta sentencia, por lo que no entrará en prisión salvo que cometa otro delito en el periodo de cinco años.
La Fiscalía había pedido inicialmente 12 años para el mediapunta de 32 años, al que acusaba también de acoso sexual, cargo que fue desestimado por el juez.
Turan se vio envuelto en una pelea con el cantante turco Berkay Sahinen un club nocturno de Estambul a finales del pasado año, después de que, según la acusación, de abordar a la mujer de Sahin, el cual se lo reprochó, recibiendo un golpe del jugador que le envió al hospital con la nariz rota.
Posteriormente, el futbolista se personó en el centro y sacó una pistola y realizó varios disparos contra el suelo que provocaron escenas de pánico. El Basaksehir le sancionó por este incidente con casi 400.000 euros.
Este fue un nuevo incidente en los últimos años de la carrera de Turan, que desde que dejó el fútbol español. En 2017, anunció su retirada de la selección acusado de agredir a un periodista deportivo, aunque posteriormente retornó al combinado nacional, mientras que el pasado mes de mayo fue sancionado con 16 partidos tras empujar a un árbitro asistente durante un partido de la Superliga turca.