Un joven estudiante lasherino le dio un tiro en la cabeza a su vecina al término de una discusión, en la cual el agresor le pedía a la víctima que controlara a sus hijos, unos mellizos menores de edad que, con amigos, se dedicarían a robar por algunas zonas de Panquehua.
La víctima, Débora Rosales (33), se encuentra en grave estado, internada en el hospital Central, "con pronóstico reservado", según informó el ministerio de Seguridad. En tanto que el agresor, Cristian Calderón (20), fue detenido y podría ser imputado por tentativa de homicidio agravado.
Según contaron unos vecinos, Calderón le disparó a la mujer, cerca de las 14, en Avellaneda y 9 de Julio, casi enfrente de un quiosco llamado Belén que separa la casa de los implicados.
Pero el asunto había comenzado pasado el mediodía, cuando los mellizos con otros amigos le habrían robado a una mujer en una plaza cercana.
"Los mellizos se juntan en la esquina con tres o cuatro amigos y sus novias, que hacen de campana, y les roban a los que van a tomarse el colectivo, a los repartidores, a los vecinos", afirmó uno de ellos que estaba en la calle cuando se produjo la pelea.
Lo cierto es que, tras el presunto robo en la plaza, los mellizos se fueron para su casa ubicada en Avellaneda al 344 y hasta allí los persiguió una mujer que habría sido asaltada.
En ese momento estaban en la calle Débora Rosales y también Cristian Calderón. El joven salió en defensa de la señora, diciéndole a la madre de los adolescentes "recatá” (controlá) a esos chicos", lo que determinó la reacción algo violenta de la mujer.
La discusión tomó tanta temperatura que el joven entró a su casa (en el 340 de Avellaneda), tomó un arma y volvió a salir a la calle. Allí le disparó a Rosales en la cabeza.
Minutos más tarde llegó al lugar una ambulancia del Servicio de Emergencias Coordinado para asistir a la víctima, que fue rápidamente trasladada al hospital Central, donde se le diagnosticó "herida de arma de fuego en la zona craneal".
También llegó al lugar la Policía, que logró detener a Calderón y secuestrarle un revólver calibre 22 que habría sido usado en el hecho.
"No sé qué le pasó al muchacho, es un buen pibe, un estudiante... Los mellizos esos roban todo el tiempo, hasta a los vecinos", explicó otro de ellos que también vio la pelea.
Cerca de las 18, parientes de la víctima incendiaron la casa del sospechoso. El caso quedó denunciado en la Oficina Fiscal 5.