El hombre está acostumbrado a que sus canciones se escuchen enlos lugares más insólitos. Sabe que con su ritmo conquistó corazones a lo largo y a lo ancho de la Argentina. Por eso es habitual ver caras conocidas en sus recitales. Carlos Tevez y Ramón Ábila, por ejemplo, se subieron al escenario junto con él antes de comenzar la pretemporada con Boca. Y son muchos los que sueñan con conocerlo.
Sin embargo, en las últimas horas la Mona Jiménez se sorprendió como nunca. Y el motivo fue que su ritmo, su cuarteto, se hizo escuchar a más de 18 mil kilómetros de distancia. Más precisamente en Nagano, una ciudad de Japón, donde tiene su sede el Matsumoto Yamaga, de la Segunda División nipona. Ahí, los dirigentes armaron una gala en el teatro principal para presentar a sus flamantes refuerzos. Y los hinchas armaron una fiesta al ritmo de... ¡la Mona, sí!
Con otra letra pero con la inconfundible melodía de Beso a Beso, los fanáticos del Matsumoto Yamaga sorprendieron a sus futbolistas. Y le pusieron color y calor al evento. El video, en el que se puede ver de espaldas a los jugadores mientras los hinchas hacen flamear banderas y saltan al ritmo del cantante cordobés, se viralizó en las redes.
Y así fue como llegó a manos de la Mona, quien se sorprendió y no pudo evitar inflar el pecho de orgullo por ver la fuerza de su música. Aunque no es la primera vez que sus canciones repercuten así. En España son varias las hinchadas que adoptaron como propio Beso a Beso, un tema que fue editado en el 2006, en el disco La Mona.
