San Lorenzo y Rosario Central igualaron 2 a 2 ayer, en la cancha del Ciclón, por lo que beneficiaron a Boca Juniors que, de vencer hoy al colista Crucero del Norte, sacará una diferencia de seis y siete puntos respectivamente, con tan sólo nueve en disputa.
El equipo dirigido por Edgardo Bauza se puso en ventaja a los 14 segundos de juego a través de Héctor Villalba, después de una gran jugada colectiva. A partir de ese momento intentó blindar el área del mendocino Sebastián Torrico.
El técnico del conjunto local apeló al 4-2-3-1 para afrontar un partido trascendental y ese tanto le permitió hacer lo que mejor hace: defender bien el cero en su arco y apostar al contraataque. Tanto es así que Villalba estuvo cerca de marcar el segundo a los 23', pero el delantero no estuvo certero.
El Canalla de Eduardo Coudet propuso un juego ofensivo, con mucho fútbol y movilidad, aunque falló en los metros finales.
Sin embargo, Ruben estableció el empate a los 32’ mediante un penal. El árbitro Germán Delfino sancionó una falta de Matías Caruzzo al goleador del equipo rosarino, a instancias del juez de línea Hernán Maidana.
El 1 a 1, pese al controvertido fallo arbitral, puso algo de justicia en el marcador pero a la vez desató la furia de los jugadores, cuerpo técnico e hinchas locales.
El equipo del Chacho, que se fue expulsado sobre el final de la etapa inicial, buscó aún con mayor insistencia el arco rival en el segundo tiempo y tuvo el gol en dos ocasiones mediante Walter Montoya.
Con el transcurrir de los minutos, el partido ganó en intensidad y emotividad pero perdió en juego ya que los dos equipos lucharon más de lo que jugaron. Dentro de ese contexto, Central fue un poco más y otra vez Ruben, a los 24’, marcó el 2 a 1 luego de una gran jugada colectiva.
Sin embargo, los rosarinos no supieron conservar la ventaja y Sebastián Blanco, a los 32’, anotó el empate después de una grosera falla de Yeimar Gómez Andrade, que ingresó por Cristian Villagra.
El final del partido mostró a dos equipos jugados en ataque, hubo alguna que otra jugada de riesgo, pero nada varió y Boca festejó.
Con el 2 a 2 final, San Lorenzo, que hace 12 partidos que no pierde en condición de local (con 9 triunfos y 3 empates), llegó a los 55 puntos. En tanto que Central, que ostenta un invicto de 7 jornadas (5 victorias y 2 igualdades), alcanzó las 53 unidades a tres fechas de terminar el torneo de los 30.